Mientras deambula sin rumbo, golpeando el piso con su bastón blanco, el progresismo intenta encontrar el camino que los lleve a una alianza con Martín Lousteau. La referente de Libres del Sur, Victoria Donda, tiene previsto reunirse el miércoles con el exembajador en Washington, tras lo cual se reunirá con el armadro del massismo, Marco Lavagna y luego con los referentes peronistas Claudio Lozano y Jorge Taiana, que a su vez se encuentran en tratativas para formar parte de la convocatoria que realizó el Partido Justicialista porteño.
De todos modos, la prioridad de Libres del Sur es armar un “gran acuerdo” que no sea ni kirchnerista ni macrista, que “se convierta en una opción en 2017 para disputar la ciudad en 2019”. Para ello, algunos voceros de la agrupación plantearon que no descartan hablar con todos los sectores, aunque con la salvedad de que el espacio debe ser “progresista”.
Según evalúan los operadores de Libres del Sur, el electorado porteño está dividido en tercios -Pro, PJ, FR-, de los cuales los dos primeros tienen una buena intención de voto, aunque ésta tenga techo. Ellos buscan formar parte del último tercio, que podría ocupar Lousteau, que está formado por votantes que no poseen una inclinación política definida.
En este punto, las opciones comienzan a enturbiarse, a confundirse y aún a enchastrarse. El mapa es complicado, pero se explica de esta manera. El massismo en Capital tiene un diálogo fluido con el GEN de Stolbizer -con quien ya cerraron un acuerdo en la Provincia- y con Libres del Sur, pero también hablan con la gente del MID -una parte de los cuales están dentro del Pro- y con la gente de José Manuel de la Sota, con quienes fueron unidos en la última elección presidencial.
El massismo también se encontraba en conversaciones con Juan Manuel Olmos, pero éste decidió en los últimos días regresar al redil y volver a sentarse en la Mesa Política que orienta el presidente del PJ porteño, Víctor Santa María. Éste, a su vez, fue comisionado para armar alianzas con otros espacios políticos para octubre.
Al mismo tiempo, alrededor de un mes atrás, hablando en público en una cena de su agrupación, Donda le pidió a Massa que traiga “la ancha avenida del centro” a la ciudad, pero la respuesta del Frente Renovador fue desechar la buena voluntad y presentar un plan económico llamado “Bajemos los Precios” sin invitar a la diputada ni a su jefe, el ínclito Humberto “El Pelado” Tumini. Este destrato fue tomado por los libres casi como una ruptura, por no decir como una declaración de guerra.
Entonces, los progresistas han quedado boyando a la deriva, sin unirse ni al frente que propone el peronismo, ni al espacio de Sergio Massa. Por eso, el único carril que les queda libre es el que transita Lousteau y por allí van a intentar encontrar el camino.