El Senado aprobó este jueves 48 decretos de necesidad y urgencia que firmó el presidente Alberto Fernández desde el inicio de la pandemia, con fuertes críticas de parte de la oposición, que denunció la “complicidad” del parlamento por no dar el debate antes sobre este tipo de medidas.
La votación se dio por 41 voluntades a favor y 23 en contra, que se completan con los 8 legisladores que se encontraban ausentes.
El 18 de noviembre pasado, cuatro días después de los comicios legislativos, el oficialismo logró sacar dictamen favorable para 116 decretos, muchos de ellos cuestionados por la oposición como las prórrogas de los dictados de los períodos de aislamiento y de distanciamiento, la prohibición de los despidos, la emergencia en material ocupacional, además de la declaración de interés público de la producción de gas natural.
Con 41 votos afirmativos y 23 votos negativos quedan aprobados, en general, los dictámenes de los decretos de necesidad y urgencia puestos en consideración
— Senado Argentina (@SenadoArgentina) December 9, 2021
De acuerdo a lo publicado por el diario Perfil, con el cambio en la composición en el Senado, que pone fin al quórum propio del Frente de Todos se especulaba que el oficialismo buscaría aprobar el paquete completo de decretos pero finalmente se dio tratamiento solo a una tanda de 48 decretos, los menos “conflictivos”, de acuerdo a la lectura política.
El jefe del interbloque de Juntos por el Cambio Luis Naidenoff fue quien realizó el planteo en contra más fuerte, al sostener “no hay ningún derecho para que el oficialismo decidiera discrecionalmente que en 2020 durante ocho meses no tratara ni un solo decreto y en 2021 otros cuatro meses, lo que significa que en dos años de pandemia la comisión estuvo 12 meses paralizada por decisión política del oficialismo”.
Por su parte, el jefe del bloque del Frente de Todos José Mayans, remarcó que “el sistema de salud no estaba preparado para esta pandemia, tal es así que la primera decisión fue construir 12 hospitales en tiempo récord. Dentro de esa emergencia económica por la que estábamos pasando, el Estado ha hecho un gran esfuerzo”.
Mayans reconoció que se generó un “disgusto” con el oficialismo, situación que se replicó en buena parte de los países de la región, por las dificultades para hacerse cargo de las consecuencias de la pandemia.
El exgobernador de Río Negro Alberto Weretilneck también defendió el accionar del Gobierno: “Quiero destacar las decisiones del año pasado, que no solo fueron decisiones del Poder Ejecutivo con los DNU, sino que fueron acompañadas por todos los gobernadores y gobernadoras y aplicadas por todos los intendentes y cargos electivos en el país”.
En tanto que Mariano Recalde centró su mensaje en la defensa del dictado de decretos vinculados al área laboral y explicó que “estos DNU cumplen los requisitos formales y sustanciales que establece la Constitución. Estamos tratando DNUs que tienen una justificación mucho más clara y concreta que otros que nunca fueron cuestionados por quienes hoy se rasgan las vestiduras”.
"Estos DNU cumplen los requisitos formales y sustanciales que establece la Constitución. Estamos tratando DNUs que tienen una justificación mucho más clara y concreta que otros que nunca fueron cuestionados por quienes hoy se rasgan las vestiduras", dice @marianorecalde
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Entre los 68 que quedaron afuera del tratamiento y que podrían incluirse en la próxima sesión, ya con la nueva composición del cuerpo, figuran la reciente suba del piso del Impuesto a las Ganancias a $175 mil pesos, la reducción de las retenciones a las exportaciones a la minería, la ampliación del Presupuesto 2021 o la derogación del decreto del ex presidente Mauricio Macri que impedía el ingreso de extranjeros con antecedentes.