Federico Cuomo, dirigente industrial de la provincia de Buenos Aires, invitó a un grupo de empresarios a jugar un partido de fútbol con internos de la Unidad Penal 24.
“Fue el partido del perdón, se habló mucho del arrepentimiento”, explicó Cuomo, que desde hace ocho años trabaja en las prisiones con un grupo Evangelista, el MCCI – Ministerio Carcelario por el Cambio Interno.
Cuomo ayuda en la capacitación laboral de los detenidos y ya ha contratado a exconvictos para que trabajen en su empresa (Agua Tronador) una vez que salen en libertad.
“Jugamos y después almorzamos todos juntos en el pabellón”, contó Cuomo. “Queríamos que los empresarios vieran la realidad carcelaria. La idea era que se bajen los prejuicios, que se entienda cómo es la vida en la cárcel”, explicó.
Luego del partido, mantuvieron una reunión con el personal del área de trabajo del Servicio Penitenciario Bonaerense.
“Ellos nos explicaron en qué podemos colaborar desde afuera. Por un lado, se pueden pedir servicios de herrería, textil, entre otros, que brindan los internos desde la cárcel. Por otro lado, un empresario puede proveer herramientas para promover algún tipo de trabajo dentro de la prisión”, relató Cuomo.
“Los internos quedaron muy agradecidos. Y uno de los empresarios que participó ya propuso promover la fabricación de detergente desde el penal, para abastecer a otras unidades e incluso para afuera”, detalló.
Por último, contó que desde la agrupación en la que participa, también se promueven las habilidades emprendedoras de los detenidos, y se los capacita y acompaña para posibilitarles una salida laboral una vez que obtengan la libertad.
Del encuentro participaron 22 empresarios de distintos municipios bonaerenses, así como el jefe del complejo penitenciario de Florencio Varela, el jefe de la unidad 24 y el director de trabajo del SPB, Martín Marcos.