La tensión constante que se vivió durante gran parte del martes durante el debate en Diputados por la nueva fórmula de movilidad para actualizar las jubilaciones encontró un punto de distensión y hasta de humor en la Cámara Baja: Fernando Iglesias se equivocó al emitir su voto y terminó apoyando la iniciativa del oficialismo. Por ende, debió rectificar su voto.
Ante esa circunstancia, el Presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, aprovechó la ocasión para referirse a ese episodio y hasta burlarse del legislador de Juntos por el Cambio, quien a lo largo de todo el 2020 mantuvo una actitud muy “combativa” desde su micrófono.
“Dios a veces nos regala momentos especiales. Ustedes saben que a lo largo de todo el año he sufrido la inconducta del diputado Fernando Iglesias”, comenzó Massa en su discurso de referencia a la rectificación de voto del legislador.
“Dios me acaba de regalar un momento único. Para mí que el diputado Máximo Kirchner lo convenció en el discurso porque tiene que rectificar el sentido de su voto”, lo que provocó risas generalizadas y un vitoreo por parte de algunos legisladores oficialistas.
“Le voy a dar la palabra al diputado Fernando Iglesias, pero sólo para que rectifique el sentido de su voto”, espetó el presidente de la Cámara.
Así, Iglesias también respondió con algo de sorna: “Me emocionaron tantas verdades que escuché. Tengo que rectificar: mi voto es negativo”.
Otro legislador que tuvo que adoptar la misma medida de Iglesias fue el diputado de la Coalición Cívica Rubén Manzi, quien también debió rectificar el sentido de su voto y aclarar su rechazo a la propuesta oficialista.
“El intento de convertirme en converso no fue fructífero. Mi voto es negativo”, afirmó Manzi, a lo que Massa respondió: “Échele la culpa a su celular” y el catamarqueño sentenció: “No, a mí mismo”.
Tras once horas de sesión, el oficialismo consiguió la sanción definitiva con 132 votos a favor, en tanto que fueron 119 los negativos.
La norma que el oficialismo aprobó establece la aplicación de un ajuste trimestral de los haberes previsionales con una fórmula que combina un 50% de la recaudación de la Anses y otro 50% de la variación salarial medida por la evolución de los salarios formales que realiza el Ministerio de Trabajo (RIPTE) y de los salarios que mide el Indec, en donde se impondrá el que sea mayor.
Con esta aprobación, aunque todavía hay tiempo para que sea reglamentado hasta febrero de 2021, el Ejecutivo aplicará una nueva fórmula de movilidad a todo un universo comprendido por 18 millones de personas, entre jubilados, pensionados, pensiones no contributivas, Asignaciones Familiares, Asignación Universal por Hijo (AUH) y Pensión Universal al Adulto Mayor (PUAM).
La fórmula inicial que había enviado el Ejecutivo a Diputados y que fue modificada en el Senado establecía dos actualizaciones al año que se conformaban 50% a base del crecimiento de los salarios y 50% a base de la recaudación. Además, establecía que el aumento de 5% de diciembre que se otorga por decreto iba a ser tomado a cuenta del incremento que se aplique con la nueva fórmula en marzo de 2021.
En su paso por el Senado y a sugerencia del Frente de Todos, se le introdujeron cambios sustanciales para que, entre otros aspectos, los aumentos previsionales sean trimestrales, con lo cual habrá cuatro incrementos por año.