El dirigente de Republicanos Unidos (RU) y funcionario porteño, Yamil Santoro, fue uno de los impulsores para la adquisición de armas menos letales. “En el mundo, hace 50 años que existen armas para disuadir”, afirmó
Luego de conocerse la resolución del titular de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMac), Natasa Loizou, para que el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires pueda utilizar las 60 armas Taser que había adquirido y que desde Nación tenían trabadas; el dirigente liberal Yamil Santoro celebró la resolución del tema. En último febrero, Santoro, junto a los legisladores porteños Roberto García Moritán y Marina Kienast, y los abogados José Magioncalda, Juan Fazio y Juan Otegui, presentaron una denuncia penal contra los funcionarios nacionales responsables de la falta de respuesta por parte de la ANMaC .
En ese sentido, el referente de Republicanos Unidos aseguró: “Nuestro espacio siguió siempre este tema con total atención. En nombre del progreso dejamos sin herramientas a nuestras fuerzas de seguridad, cuando la legislación de la Ciudad no sólo habilita, sino que también propicia el uso de armas menos letales”.
Luego de que la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMaC) autorizara la adquisición de las TASER por parte del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el responsable, Ramiro Urristi, renunciaría al cargo y, a partir de ese momento, el organismo comenzó a dilatar injustificadamente la autorización de importación.
Para el dirigente liberal “es obvia la relación entre la denuncia que realizamos y la expeditiva resolución que hizo la ANMaC. Estuvo parado 18 meses, incluso con un amparo en curso del gobierno de la Ciudad. En las semanas que transcurrieron desde la denuncia, el fiscal allanó las oficinas de ese organismo. Hoy mágicamente sale el permiso. Es una vergüenza cómo se maneja este gobierno”.
Por último, dijo que “no hay nada más progresivo o respetuoso de los derechos humanos que la progresividad del uso de la fuerza. Que un agente pueda usar la fuerza menos letal posible. Hoy saltamos de usar un bastón, a usar una 9 mm. Mientras, en el mundo, hace 50 años que existen armas para disuadir. Esto salvaría vidas de oficiales y de civiles. No obstante esto, estamos mandando indefensas a nuestras fuerzas a la calle, por las mezquindades políticas del gobierno nacional”, finalizó.
