La elección presidencial de 2015 fue la última pelea nacional con más de dos contendientes fuertes en la cancha. Si bien ya en las PASO de ese año pareció quedar claro que la batalla final sería entre el Macri de Cambiemos y el Scioli del Frente para la Victoria, la irrupción de Massa y su Frente Renovador, obligó a observar ese proceso electoral con anteojos de tres lentes.
En aquellas primarias, y luego en la primera vuelta, el actual titular de Diputados no sólo consiguió el mérito de llegar a los dos dígitos, sino que estuvo por encima de los 20 puntos. Le faltó poco –o no tanto- para demostrar que él y no Macri era la mejor alternativa para correr al kirchnerismo del poder. Las vueltas de la política lo volvieron a poner en el mismo lugar y hoy Massa sueña con convertirse en el candidato a presidente del oficialismo en el 2023. Pero esa es historia para otro análisis.
Lo curioso de este proceso previo a la próxima elección es que el tercer elemento no viene de un peronismo moderado, ni de otra pretendida avenida del medio, sino de una colectora que pisa fuerte por derecha y tiene nombre y apellido: Javier Milei.
Las encuestas muestran que la suma de este economista libertario, junto con lo que puede aportar José Luis Espert, ubican a ese sector en un lugar expectante. Por ahora, no llega a jugar de igual a igual contra Juntos por el Cambio y el Frente de Todos, pero al menos actúa para atenuar la grieta. Como último antecedente, en la presidencial de octubre de 2019, la polarización fue extrema: sumaron casi 90 puntos el debutante Alberto Fernández y el repetidor Macri.
Noticias Urbanas accedió a dos estudios que midieron para el 2023 y dan cuenta de este fenómeno, ya no tan novedoso ni tan incipiente.
Opina Argentina
La firma que conduce el analista Facundo Nejamkis, ex funcionario durante la presidencia de Cristina Kirchner, hizo un estudio nacional de 1.000 casos. Allí preguntó: “Si las elecciones fuesen el próximo domingo, ¿a qué espacio político votaría?”.
Juntos por el Cambio quedó adelante, con una diferencia similar a la que le sacó al Frente de Todos, pero en escalas más bajas: 35% a 26%. Y en parte, ese bajón de la grieta se debe al 16% de la variante “los liberales de Milei y Espert”. Completan 4% del Frente de Izquierda, 9% de “otros”, 8% de “ns/nc” y 3% de “en blanco”.
Desagregado por sexo, edad, nivel socioeconómico y zona, JxC se hace un poco más fuerte entre las mujeres, los mayores de 50, los de nivel económico medio y alto, y los de CABA y el interior. En espejo, el FdT se potencia entre los de 30 a 49, los de nivel bajo y los del GBA.
Los liberales, en tanto, mejoran su media entre los hombres y los jóvenes de 18 a 29.
Opinaia
La firma pionera en mediciones online hizo un estudio de 2.400 casos a nivel nacional. Y también abordó la cuestión electoral, evaluando posibles internas. Como con el anterior sondeo mencionado, se vio una polarización atenuada, aunque en este caso más pareja.
Cuando la firma preguntó a quién votaría para presidente, cuatro precandidatos del Frente de Todos (Alberto, Cristina, Kicillof y Massa) y cinco de Juntos por el Cambio (Macri, Larreta, Bullrich, Lousteau y Morales) juntaron en ambos casos 32 puntos. Y los liberales Milei y Espert, interesantes 17. Completaron Nicolás Del Caño del FIT con 4%, Juan Schiaretti del PJ Federal con 3% y 12% de indecisos.
La duda de los analistas es cómo quedará configurado este escenario, cuando se acerque la hora de la votación. ¿Otra vez a full la grieta o habrá lugar para un tercero?