Alejado de los pasillos palaciegos -a pesar de que visita seguido la Casa Rosada-, Ernesto Sanz se siente libre para opinar sobre la marcha del Gobierno, a veces con escasa solidaridad hacia el presidente, Mauricio Macri. El aporte que realizó el senador mendocino al armado electoral de Cambiemos lo convirtió en un hombre de consulta imprescindible para el primer mandatario, pero las facturas pendientes afloran de vez en cuando y Sanz no ahorra definiciones críticas contra la marcha del Gobierno.
En una nota radial, el mendocino -que aspiraba a ser el jefe de Gabinete de Macri y se alejó del ex jefe de Gobierno porteño cuando esa posibilidad fue descartada-, destacó paradójicamente su cercanía con el presidente -“hay semanas que lo veo todos los días”, acotó-, pero no por eso dejó de remarcar algunas decisiones que entorpecen su marcha.
“El Gobierno muchas veces se ha equivocado por seguir la ciencia de Durán Barba”, cuestionó el senador, que se mostró también opositor en otros temas. “La política no es seguidismo de encuestas, es el ejercicio del poder para transformar la realidad”, se diferenció, dejando en claro sus similitudes con Macri y también sus diferencias.
En este mismo sentido, la sentencia final de Sanz fue lapidaria. “Si hubieran habido encuestas hace 200 años, San Martín no hubiera cruzado los Andes. El político es el que genera encuestas, no el que depende de ellas”, dejó en claro el veterano político, que remató asegurando que “el tarifazo fue el problema más grande que tuvo el Gobierno”, sin ahorrar asperezas.