Según una encuesta nacional realizada por Opina Argentina pensando en el escenario 2023 los los resultados serían un revival de 2015, con Juntos por el Cambio encabezando las preferencias del electorado, pero con actores nuevos. En este caso ya no serían los peronistas anti K de Sergio Massa de hace siete años, sino los liberales de José Luis Espert y Javier Milei quienes se ubican en el tercer puesto de las preferencias electorales.
El estudio al que accedió el diario Clarín fue realizado por la consultora Opina Argentina entre el 3 y el 5 de enero quien hizo un relevamiento de 1.200 casos, combinando entrevistas telefónicas con presenciales. Y difundió los resultados con +/- 3% de margen de error.
El sondeo arranca con un interesante planteo sobre qué tipo de liderazgo quieren los argentinos -si más decisivo o más consensual- y la conclusión es que, más allá del matiz, no hay ningún estilo en el que una amplia mayoría esté de acuerdo. A diferencia de lo que pasó en el post 2001, cuando el grueso de la sociedad pedía una fuerte intervención del Estado para salir del agobio económico y social.
Según remarca el informe de la firma que conduce Facundo Nejamkis, esta polarización particular, con cierto hartazgo en la política tradicional, puede favorecer para que emerja en la próxima presidencial un tercer imán electoral.
La pregunta realizadas fue: “Si las elecciones fuesen el próximo domingo ¿A que espacio político votaría?” y el resultado fue el siguiente:
1) Juntos de Macri y Larreta: 34%.
2) Frente de Todos de Alberto y Cristina: 29%.
3) Liberales de Espert y Milei: 15%.
4) Frente de Izquierda: 2%.
– Ns/nc: 13%.
– Otro: 6%.
– En blanco: 2%.
Si se comparan estos números con el último parámetro, la legislativa de noviembre pasado, se achica la polarización, se reduce también la distancia a favor de JxC, crecen los liberales y baja la izquierda. A todos los afecta, claro, un nivel de indecisos en dos dígitos (13%).
Cuando se hacen los desagregados por sexo, edad, nivel socioeconómico y zona, aparecen estos datos:
Juntos por el Cambio consigue sus mejores registros entre las mujeres (43%), los mayores de 50 (38%), los de mayores ingresos (36%) y en CABA (53%).
El Frente de Todos, entre los hombres (31%), los de 18 a 29 (32%), los de menores ingresos (42%) y en el GBA (44%).
A los liberales, en tanto, les va mejor entre los hombres (24%), los de 30 a 49 (23%), los de mayores ingresos (20%) y en las ciudades de menos de 100 mil habitantes (19%).
Para Nejamkis, a diferencia de lo que pueden presumir muchos, el apoyo a los liberales proviene también desde exvotantes del Frente de Todos: “Es simple matemática. Si Juntos por el Cambio sacó 40% en 2019 y 40% en 2021, y el oficialismo bajó 18 puntos, el crecimiento de otras fuerzas provino de ahí. También se puede comprobar cuando se observa la buena cantidad de votos que sacó Milei en la Villa 31 o en Lugano”.
El titular de la consultora agrega también: “Hay que prestar atención a la muy buena performance que tiene en el escenario electoral la fuerza de los libertarios que expresan Milei y Espert. Si bien es cierto que las elecciones presidenciales tienden a moderar las propuestas políticas e inclinarlas hacia el centro, es posible pensar que la no resolución de los grandes problemas argentinos deriva en una decepción con el sistema político en su conjunto”.
Y concluye: “¿Y si los decepcionados y enojados dejan de votar en contra de y votan a favor? Esa posibilidad es tan válida para los votantes de Juntos como para los del Frente de Todos, aunque parece ser esta última fuerza, por ahora, la que mas viene sufriendo pérdidas en términos de intención de voto. Paradojas de la política, los libertarios se alimentan de la crisis del peronismo”.
