Aún no asumió su mandato pero ya recibe muchas críticas. Al menos, así lo viven los 250 trabajadores despedidos de la Biblioteca Nacional y del Museo del Libro y de la Lengua, que representaban un cuarto del personal de las instituciones. Alberto Manguel fue designado en diciembre pasado por el Ministerio de Cultura de la Nación, a través de su titular, Pablo Avelluto.
El grupo de personas –aproximadamente treinta- escrachó a Manguel con carteles que decían “La biblioteca Nacional no es un negocio”, “No a la Biblioteca Off Shore” y, a modo de pregunta, “¿quién dirige la Biblioteca Nacional?”. Además, abuchearon al “CEO” –como lo describió el ex director de la institución, Horacio González- o “ensayista”, según indica La Nación en una entrevista que le realizó. En ese medio, Manguel afirmó que “la Biblioteca debe funcionar como una biblioteca”, argumentando que no debe haber actividades que no se correspondan con la razón de ser de una biblioteca: “Ser un instrumento para sus lectores”.
