Acaba de jurar como presidente del bloque Vamos Juntos en la Legislatura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (la bancada que integra al Pro, a la CC-ARI y a Confianza Pública), luego de conducir la estratégica Comisión de Planeamiento Urbano. Su desempeño en esa área, por la que el oficialismo logró despachar con éxito importantes proyectos urbanísticos promovidos por el Ejecutivo local, le valió el reconocimiento del jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, quien lo nombró en el puesto que acaba de dejar Francisco Quintana. En diálogo con Noticias Urbanas, el diputado Agustín Forchieri analiza cómo será el trabajo con la nueva conformación del cuerpo legislativo y la unificación del bloque oficialista y adelanta algunos proyectos prioritarios para su espacio político.
–En Vamos Juntos van a convivir varias fuerzas, ¿qué grado de dificultad interna estima que habrá para que puedan lograr posturas unificadas?
–Las diferentes visiones que aportan las distintas extracciones políticas que conforman el bloque no dificultan sino que enriquecen el debate y, por lo tanto, los proyectos que trataremos en la Legislatura. Confío que vamos a tener una muy buena convivencia y trabajar en conjunto para lograr las mejores leyes.
–El hecho de tener 33 legisladores le da al oficialismo la posibilidad de poseer cuórum propio y la mayoría necesaria para aprobar todas las leyes, salvo aquellas que requieren los dos tercios del cuerpo. ¿Buscarán que las normas salgan por consenso o aplicarán la lógica de la mayoría automática?
–Así como te digo que el debate interno es bueno, también lo es el externo. Los intercambios de ideas con la oposición son bienvenidos para mejorar cada proyecto que tratamos. El Pro siempre se ha caracterizado por su vocación de diálogo, y Vamos Juntos irá por el mismo camino. Y, como vos lo expresaste, las leyes más importantes requieren de mayorías especiales que solos no podemos alcanzar. Los grandes proyectos de la Ciudad nos deben encontrar a todos trabajando codo a codo más allá de los espacios o bloques políticos a los que pertenezcamos.
–¿Qué proyectos de los que tiene en carpeta el oficialismo son considerados prioritarios?
–Un nuevo Código Urbanístico y de Edificación que ponga a la Ciudad de Buenos Aires al alcance del futuro es quizás uno de los más importantes. La Universidad de Formación Docente es otro. Pero año tras año surgen proyectos muy importantes para una Ciudad que está siempre en movimiento.
–¿Qué otras deudas tiene todavía el Gobierno porteño?
–El equipo encabezado por Horacio [Rodríguez Larreta] tiene una visión de Ciudad urbanísticamente integrada y socialmente inclusiva, en la que podamos sentirnos más seguros, disfrutar de un espacio público ordenado y limpio, viajar mejor, vivir mejor. Las deudas que tenemos son los pasos que aún nos quedan por delante en ese camino que emprendimos con mucha fuerza.
–¿Qué balance hace de su gestión al frente de la Comisión de Planeamiento Urbano?
–Creo que hemos ayudado al Ejecutivo, en lo que nos correspondía, a construir ciudad donde no la había y a reurbanizarla donde era necesario. Pudimos consensuar y despachar para su debate y posterior aprobación importantes proyectos, como el del Paseo del Bajo, la obra vial porteña más importante de los últimos cincuenta años, que descongestionará el tránsito pesado en la zona y aportará varias hectáreas de espacios verdes; la Villa Olímpica, que revitalizará la Comuna 8 y brindará soluciones habitacionales a los vecinos del barrio una vez que terminen los Juegos Olímpicos de la Juventud del año que viene; la eliminación de barreras ferroviarias y la construcción de viaductos, y la urbanización de villas, solo por mencionar algunas de las principales iniciativas, las cuales, estamos convencidos, van a significar un enorme cambio positivo para la Ciudad y los que la habitamos.
–Desde la oposición suelen argumentar que la urbanización de villas que promueve el Gobierno porteño no resuelve sus problemas estructurales, que son soluciones “cosméticas”. ¿Usted qué responde a ese cuestionamiento?
–Yo respeto mucho las críticas constructivas de la oposición bienintencionada y sé que muchas veces hay cosas para mejorar, y trabajamos en eso permanentemente. Pero no se puede hablar de “cosmética” o “maquillaje” cuando una familia que no tenía cloacas o agua potable de red ahora las tiene, cuando cambiamos barro por asfalto, cuando mejoramos las viviendas o construimos nuevas según la necesidad de cada caso. Este Gobierno demostró que incluye e integra. Mucho más que otros que, en los papeles previos, podrían considerarse progresistas. Y gran parte de la oposición acompañó los procesos de reurbanización en marcha y aportó ideas muy interesantes. No creo que la mayoría piense que se trata de maquillajes.
–Pasemos al ámbito nacional. ¿Cree que el Gobierno de Macri manejó bien la crisis que se generó con la tragedia del submarino?
–El Gobierno hizo lo que se puede hacer ante una situación terrible como esta: buscar con todos los recursos al navío y a sus 44 tripulantes, acompañar a los familiares e informar de los avances a la opinión pública. Otra cuestión es si dentro de la Armada se manejó bien la información y se la trasmitió a tiempo al poder político. Eso debe ser materia de investigación para poder así deslindar responsabilidades en su debido momento. Una jueza está a cargo del tema, y el Presidente ordenó que se levante la clasificación militar de la información y se le remita a la jueza todo lo que ella ordene.
–¿Pero Macri no debería haber estado más presente?
–El Presidente estuvo absolutamente presente: presente donde tiene que estar, no desde un lugar mediático sino de gestión, consiguiendo una ayuda internacional inédita para nuestro país, destinando todos los recursos propios a la búsqueda, recibiendo y procesando diariamente toda la información. Me consta la consternación profunda del Presidente por la vida de estos 44 héroes de la Armada y también me consta que ordenó agotar los medios para su búsqueda.
–Siguiendo con el tema nacional, ¿cómo se hace para terminar con la grieta que divide a los argentinos?
–Trabajando juntos y generando consensos, pero, sobre todo, entendiendo que si nos unimos podemos hacer de la Argentina el país donde nuestros hijos merecen vivir.