La oficialización de la candidatura de Rafael Bielsa -el tercer candidato de peso en el distrito, junto con Mauricio Macri y Elisa Carrió- introdujo un nuevo elemento en la campaña porteña, que acumuló varias sorpresas, por derecha y por izquierda, en las últimas horas en las que amgaron con competir en la Ciudad Domingo Cavallo y Luis Zamora. Y hasta una nueva opción, desde la izquierda, que llevaría a Alicia Castro como candidata en una lista porteña.
"La decisión del presidente Néstor Kirchner de que el canciller Rafael Bielsa sea su candidato en Capital frente a una elección difícil, confirma que la política exterior carece de autonomía propia", analiza el director del Centro de Estudios para la Nueva Mayoría, Rosendo Fraga.
Por el contrario, la consultora Graciela Romer -quien la semana que viene tendrá una medición sobre el primer tramo de la campaña porteña-, evaluó para NOTICIAS URBANAS que "si bien Carrió está actualmente por delante de Bielsa en intención de voto, el canciller supera a la candidata del Ari en imagen, por dos o tres puntos, porque los porteños tiene una evaluación favorable de la gestión del Gobierno en materia de Relaciones Exteriores; la perciben con mayor autonomía que la de los años noventa".
Un dato: la gente, según Romer, suele confundir el manejo de la deuda externa -que tiene una valoración positiva en la sociedad- con el área de las Relaciones Exteriores. "Por otra parte, para cualquier análisis hay que tener en cuenta que la sociedad porteña es sofisticada y compleja; no sirven los análisis simplistas".
Para el encuestador Enrique Zuleta Puceiro, que midió los primeros tres días de la campaña en la Ciudad, "Elisa Carrió está primera, Mauricio Macri segundo, muy cerca, y tercero, a siete puntos, Rafael Bielsa, aunque hay que decir que su intención de voto trepó al doble desde que se anunció oficialmente su candidatura". El trabajo de Opinión Pública, Servicios y Marketing (OPSM) se hizo en los primeros tres días de esta semana. Se trata de una encuesta telefónica a 400 personas de todo el distrito porteño.
Los últimos sondeos de Romer coinciden en que Carrió, en el arranque de la campaña, se ubica primera seguida de Macri y Bielsa. "Sin embargo, el crecimiento de Macri tiene un techo que es su alta imagen negativa, algo más
del cuarenta por ciento; eso lo limita".
El consultor Artemio López, en diálogo con NOTICIAS URBANAS, indicó que "aunque todavía es temprano para medirlo, la campaña porteña va a tender a desdistritalizarse o, para decirlo de otro modo, a metropolitanizarse, sobre todo cuando Cristina Kirchner oficialice su candidatura; va a haber un corredor Bielsa-Cristina, despojado de las estructuras tradicionales de los partidos, que es lo que hace fuerte a Kirchner. El eje Macri-López Murphy también ayuda a nacionalizar la elección capitalina", según López.
En este punto, Zuleta coincide con Artemio López. El estudio reciente de OPSM reveló que el 55 por ciento de los consultados afirma que va a votar pensando en la cuestión nacional. "No afirman que votarán a favor de lo que pide el Presidente, sino tomando en cuenta la cuestión de Kirchner", opinó Zuleta.
Para Romer, en cambio, todavía es "muy temprano" para que la cuestión de plebiscitar la gestión sea tomada por la sociedad porteña. "La gente no tiene la más mínima idea de lo que significa la estrategia presidencialista de plebiscitar la gestión".
"En el contexto de debilidad que asumió Kirchner es lógico ahora que haga explícito la idea de plebiscitar su Gobierno -destacó Romer- Pero esta es una idea común en todas las democracias desarrolladas del mundo", destacó la consultora.
A su turno, Fraga, opinó que "la Capital no es un distrito fácil para Kirchner y en principio el electorado se divide en tres tercios: el de centroderecha con Macri, el de centroizquierda con Carrió y el del Gobierno con Bielsa, quien lanzó su campaña definiendo que no tendrá a Ibarra en su lista".
EL FACTOR IBARRA
Para Romer, la toma de distancia de Bielsa con respecto al Gobierno porteño es "coherente" con la posición de distanciamiento del Gobierno nacional respecto a "su protegido capitalino".
Artemio López destacó, en este punto, que "no es posible" una campaña de Bielsa sin despegarse de Aníbal Ibarra, debilitado tras la tragedia de Cromañón. "Lo que pueden evaluarse aquí son las modalidades de ese despegue. Un eje para Bielsa debería ser la comparación de gestiones; la asincronía de gestiones entre la Nación y la Ciudad, en donde desde el 2003 la Nación registró una mejoría que no se advierte en el distrito".
Para Zuleta, Bielsa y Carrió obligarán a Macri a tomar posiciones todos los días con respecto a diversas cuestiones como la de los militares, el aumento a los jubilados, el tema salarial. Para este consultor, el jefe de Boca tendrá que afrontar "test diarios de consistencia".
Finalmente, en la entrevista con esta agencia, Romer dio un ejemplo de "sofisticación de los porteños":
"Una porción de quienes van a votar a Carrió en Capital son adherentes de muchos aspectos de Kirchner a nivel nacional; apoyan, por ejemplo, la cuestión económica pero sin embargo tienen objeciones en el manejo institucional, sospechan de influencias políticas en la Corte o cuestionan los decretos de necesidad y urgencia".
Finalmente, y de aquí en más, habrá que ver cuál es la influencia que tendrá sobre el mapa porteño la oficialización de los candidatos de última hora: Cavallo, Zamora y Alicia Castro. Según los encuestadores, hasta el momento, el 80 por ciento de los votos se repartirá entre Macri, Carrió y Bielsa. Y si la elección no se polariza, con un 35 por ciento de los votos podría ganarse la Ciudad. Un escenario en el que cualquiera de los tres pesos pesados puede ganar.