"De mi Gobierno podrán decir muchas cosas, pero no que nos dedicamos a robar o que permitamos la corrupción. Si hay algo que rescato es la honestidad y la ética en la administración pública. Yo admito que podría haber hecho en algunos casos mejor las cosas o más todavía, y en esto soy autocrítico y lo he hablado siempre de frente a la sociedad. Pero siempre he sido absolutamente coherente e inflexible con defender la ética en la función pública", afirmó el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Aníbal Ibarra.
El titular del Ejecutivo porteño explicó en declaraciones al programa "Hoy por hoy", que se emite por Radio Mitre, que busca su reelección "porque quedaron muchas cosas pendientes. Nadie previó lo que iba a pasar en la Argentina y yo siempre lo dije desde el primer momento públicamente que muchas de las cosas que teníamos previstas hubo que ponerlas en stand by o suspenderlas por la caída brutal de los recursos, por la crisis, y porque hubo que atender cosas centrales. Y recién ahora empezamos a retomar nuevamente el ritmo de las obras públicas, de los proyectos para la ciudad, por ejemplo la extensión de la red de subterráneos. La próxima semana viajó a la Asamblea del Banco Interamericano de Desarrollo para tramitar una serie de créditos destinados a la realización de obras públicas en la Ciudad".
Ibarra aseguró que "no me embriagó la función pública. Yo tengo muchos cables a tierra porque el riesgo de quedar embriagado es cierto, es real, pero lo digo con cosas puntuales, estoy mucho con los chicos, con mi familia, leo, sigo haciendo deportes, juego al fútbol, tengo los mismos amigos de siempre, mantengo esos cables a tierra, voy al supermercado".
El ex fiscal porteño reconoció que "esta elección viene complicada, pero también lo fue con Cavallo. Creo que acá va a haber una polarización con Macri que, por un lado, se presenta como ajeno a la política cuando en realidad no lo es. Macri viene de fuertes vínculos con el menemismo a tal punto que reconoció públicamente que cambió su domicilio a 1.000 kilómetros de distancia, a Misiones, para votar a un menemista. También se presenta como empresario exitoso cuando en realidad su grupo empresario con el padre lo que hizo centralmente fue negocios con el Estado, con el mismo (RAmón) Puerta en Misiones, y aquí en la Ciudad de Buenos Aires".
Con respecto a la posible candidatura de Gerardo Sofovich para jefe de Gobierno de la Ciudad, Ibarra sostuvo que "Sofovich es íntimo amigo de Macri, por lo que creo que en todo caso harán un acuerdo. Y si se presenta, en todo caso, le sacará votos a Macri no creo que me saque a mí porque yo si hay algo que nunca hice fue no solo votar, sino estar siquiera mínimamente cerca del menemismo. Al menemismo siempre lo he confrontado y creo que sería una regresión brutal para la Argentina el menemismo. No creo que piense lo mismo Macri y, por supuesto, no piensa lo mismo Sofovich".