Hasta hace muy poco tiempo, Nicolás Ducoté, máster en políticas públicas por la Universidad de Harvard, era sinónimo de opinión política técnica, objetiva y, sobre todo, apartidaria. Lo habitaba el lenguaje del consenso, la institucionalidad y la calidad democrática, que impartía desde su sillón de director ejecutivo de Cippec (Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento), la ONG con más puentes tendidos en el mundo de la política. Sin embargo, algo hizo cambiar de rumbo a Ducoté, y casi de un día para el otro colgó su traje de técnico y se probó el de gladiador de la real politik. Ahora trabaja con Francisco de Narváez, y su oficina está en el muy coqueto barrio de Las Cañitas. El empresario lo convocó para que coordine sus equipos técnicos de cara a 2011.
Su tarea se despliega ahora en tres metas: elaborar un programa de desarrollo nacional de largo plazo; perfilar un plan de gobierno, que incluye a la provincia de Buenos Aires y la Capital, y convocar a activistas y voluntarios para que apoyen a De Narváez.
?Hay algo que me resulta curioso, usted desde Cippec siempre hacía hincapié en la institucionalidad como valor, pero ésa nunca fue una bandera del peronismo, como sí lo son otras virtudes políticas ¿por qué, entonces, eligió el peronismo a la hora de pasarse al otro lado del mostrador?
?Es cierto, institucionalidad y transformación no suelen ser sinónimos, pero ocurre que el peronismo reunía para mí dos condiciones que comparto: la preferencia por los más pobres y la vocación de cambio. Es cierto que el radicalismo siempre tuvo mucho más apego por las instituciones, pero el peronismo es clave a la hora de provocar cambios. Incluso cambios en las instituciones.
?¿Su familia es peronista?
?No, y te digo más: podríamos decir que mi familia es antiperonista. Es un cambio que se fue produciendo.
?¿Y qué cree que puede aportarle usted al PJ?
?Transparencia, reglas de juego claras, más institucionalidad, precisamente.
?¿Y el PJ seguiría siendo el PJ con más institucionalidad? Se lo pregunto por su impronta movimientista.
?Ése es el desafío. A diferencia de muchos, creo que el cambio tiene que operarse, primero, en los grandes partidos nacionales, y no creando nuevas fuerzas que sólo fragmentan más.
?¿Por qué le interesó seguir a De Narváez y no a Sabbatella o a Binner, que siempre estuvieron más cerca de Cippec?
?Precisamente, con Martín tengo dos diferencias básicas, y una es la que te comentaba: su negativa a trabajar dentro del PJ.
?Dice que es el tren fantasma.
?Bueno, por eso. Ésa es una primera diferencia insalvable porque yo creo lo contrario y apuesto a recrear una nueva política transparentando los partidos tradicionales. Él no sólo no lo cree sino que decidió crecer en su propio partido distrital. Aunque, ojo, quizá me veas dentro de un año diciendo lo mismo que Martín.
?¿Y la segunda diferencia con Sabbatella?
?Sus socios del Congreso: no tienen los mismos valores que yo y son muy distintos a Sabbatella.
Cuida mucho sus palabras porque sabe bien que la política es un juego mucho más cruel que el de la sociedad civil. Muchas veces recordará en esta entrevista que es ?nuevo? en la política y opinará con el mismo recato de quien entra por primera vez, y tanteando, a un barrio desconocido y con fama de heavy.
?¿Cómo está viviendo el choque con la real politik?
?Siempre creí que la política, a diferencia de la sociedad civil, tenía una lógica de suma cero. Ése fue siempre mi prejuicio y supongo que haré un aprendizaje con este pasaje. También solía creer que, en la sociedad civil, se podía consensuar con un mayor espíritu constructivo.
?Ayúdenos con un ejemplo.
?Por ejemplo, si Francisco abre un local en la Ciudad y quiere hacer política en Capital, el mundo de la política podría tomarlo como que Francisco le está queriendo cooptar la gente a Macri.
?¿Y qué otra lectura puede hacer?
?Que Francisco puede sumarle a Macri, acercándole gente que jamás votaría a Mauricio, pero sí a De Narváez. Se lo puede ver como una suma de activos.
?Y dígame, ¿cómo piensa quitarle a De Narváez esa imagen de excéntrico millonario que algunos tienen de él?
?¿Te acordás de la campaña de Filmus, que decía ?si lo conocés, lo votás?? Bueno, de Francisco podría decirte lo mismo: si lo conocés, dejás de tener el prejuicio del excéntrico millonario. Él va a cualquier barrio y escucha. Tendrías que ver cómo la gente le pregunta y se comunica con él vía Facebook, Twitter, y cómo él responde.
?Está como Obama.
?Bueno, es la idea.
?¿Ser como Obama?
?No, usar algunos elementos de la tecnología al servicio de hacer política y manejarnos con las redes sociales.
?¿Usted le aconsejó a De Narváez que rompiera con Macri?
?De ninguna manera. Al contrario. Como te decía antes, creo que se puede ver como una suma en la que cada cual, por su lado, aporte activos para ambas fuerzas. Un capital político que se dirimiría en la etapa de distribución de los cargos electivos, aunque para eso que falta mucho.
?¿Pero ese acuerdo que menciona es explícito entre ellos?
?No, pero está implícito.
?¿Para usted sería lo mismo que De Narváez terminara confluyendo con Macri o con Duhalde?
?Está claro que no.
?¿Qué candidato preferiría?
?Aquel que nos permita llevar adelante nuestras ideas, que son de largo plazo. No se puede proponer un programa para 2011 si, al mismo tiempo, no se está mirando 2020.
?¿El affaire de las escuchas podría terminar con la carrera política de Macri?
?Esperemos que no, y realmente no creo que se trate de un tema de tanta envergadura como para eso.
?Pero mire que ya se llevó puestos a varios funcionarios.
?Sí, lo sé, y si bien no soy abogado, me atrevo a decir que esto no puede terminar con su carrera política.
?Macri ahora es su adversario político, ¿se acuerda?
?Sí, y espero que decir estas cosas no me traiga un dolor de cabeza.
?¿No es forzar las instituciones que De Narváez haya tanteado a la Corte Suprema para ver si puede ser candidato a presidente?
?No, depende. Hasta donde sé, Francisco no tanteó a la Corte sino que se asesoró con un grupo de juristas para explorar cuáles son sus derechos. Y hay distintas interpretaciones sobre sus posibilidades.
?¿Y usted qué le aconseja?
?Que actúe según sus propias convicciones, principios e intereses. Y uno de sus principios es la igualdad de los ciudadanos ante la ley. Y, dentro de esa igualdad, está el derecho a competir electoralmente, más allá de que se haya nacido o no en la Argentina.