El nombre de Amado Boudou estaba otra vez en el tapete. Esta vez, la atención se centraba en saber si el vicepresidente asistiría al Senado por primera vez después de ser procesado. La incertidumbre se mantuvo hasta el final y apenas minutos antes del debate se confirmó que Boudou no se presentará en el recinto.
Lo mismo ocurrió en ocasión del acto oficial por el 9 de Julio realizado el miércoles en Tucumán. La presencia de Boudou, en reemplazo de Cristina Kirchner, de licencia médica, no fue confirmada oficialmente prácticamente hasta último momento.
En cuanto a la ocurrido este jueves en el Senado, donde se buscará dar media sanción al proyecto de ley del oficialismo para proteger los activos de los bancos centrales extranjeros ante los tribunales argentinos, habría sido producto de una negociación de Miguel Ángel Pichetto con el radicalismo. El titular de la bancada kirchnerista habría garantizado la ausencia de Boudou para evitar que la oposición se pare y abandone el recinto, como habían amenazado hacer en caso de que el vicepresidente ocupe su habitual lugar.
Los bloques opositores reclaman el apartamiento del funcionario o al menos que se tome licencia tras ser procesado en la causa Ciccone por cohecho. En ese sentido, Luis Juez había advertido: “Nosotros nos vamos a ir del recinto en repudio a la presencia de Boudou y sólo vamos a volver para votar el proyecto porque estamos de acuerdo con la medida; creemos que es una forma de que el Gobierno y el oficialismo paguen algún costo político por su capricho”.
El proyecto a discutir por los senadores cuenta con el apoyo de la oposición, por lo que se descuenta que recibirá dictamen y será aprobado por el cuerpo. Por este motivo, el kirchnerismo buscó evitar una sesión que se cargue de tensión y cruces.
