Presentaron el "Caso Onega" en el Congreso Judío Mundial

Presentaron el "Caso Onega" en el Congreso Judío Mundial

Pese a que los legisladores porteños dan el tema por concluido, la DAIA no se resigna a que el caso de la diputada Mirta Onega, acusada de discriminar a un empleado suyo por ser judío, quede sin sanción. Este domingo su titular, Jorge Kirszenbaum, presentó el caso en la Asamblea Anual del Congreso Judío Mundial, que se llevó a cabo en Bruselas


Jorge Kirszenbaum, titular en ejercicio de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), presentó este domingo en Bruselas el denominado "Caso Onega". Lo hizo en la Asamblea Anual del Congreso Judío Mundial, frente a los principales dirigentes judíos del mundo, quienes se comprometieron a realizar, a partir de ahora, el correspondiente seguimiento de lo que suceda con la legisladora porteña Mirta Onega.

Onega fue denunciada por su ex empleado Norberto Cohenca por haberlo discriminado por su origen judío. La Legislatura debatió durante varias horas el dictamen emitido por la Comisión Investigadora creada para analizar las pruebas presentadas por los protagonistas, pero no se aprobó ninguna sanción ni para la diputada ni para los demás legisladores que tuvieron participación en el hecho.

La Comisión Investigadora -que presidió la diputada Sandra Bergenfeld- había aconsejado una suspensión de 180 días para Onega, pero también una pena similar de 30 días para el titular del Partido de la Ciudad, el diputado Jorge Giorno, y un apercibimiento para el legislador Carlos Ameijeiras, por haber realizado, entre los dos, una cámara oculta a Onega (en ese momento, compañera de bloque de ambos) para intentar probar sus dichos.

La cámara oculta se llevó a cabo en el despacho de Ameijeiras y fue planeada por Giorno y el subsecretario de Relaciones con la Comunidad de la Legislatura porteña, Francisco Ursic. Por su parte, Onega vinculó la cámara oculta que le hicieron a su decisión de abandonar el bloque del Partido de la Ciudad.

Kirszenbaum explicó a sus pares de América Latina estos pormenores, en el marco de un encuentro donde la preocupación principal fue, por lejos, el resurgimiento del antisemitismo en Europa.

En este sentido, una de las voces más significativas que se escucharon fue la de Jean Marie Lüstiger, arzobispo de París, quien dijo ante el plenario del Congreso que "el antisemitismo es una lacra para la civilización moderna", criterio que fue compartido no sólo por los numerosos católicos presentes, sino también por los representantes de las alas más moderadas del Islam, invitados especialmente al evento.

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