Se agita el kirchnerismo porteño tras las encuestas

Se agita el kirchnerismo porteño tras las encuestas

Los seguidores del canciller Rafael Bielsa prometen que pelearán hasta el último minuto para que su jefe no sea candidato a diputado nacional en el 2005. Sin embargo, un armado de izquierda se prepara para no claudicar ante los otros K, si se confirma la noticia más temida


"Es muy probable que (la líder del ARI, Elisa ‘Lilita’) Carrió gane en el 2005". La frase le pertenece a un operador político del canciller Rafael Bielsa, pero retumba en la cabeza del kirchnerismo desde hace una semana. "Nosotros podemos salir segundos y con mucho entusiasmo, viento a favor y suerte, pelear la elección", agregó la fuente.

Es que nada ocurrió como lo planeaban. El Partido Justicialista de la Ciudad de Buenos Aires no está normalizado y entre las sombras asusta a los kirchneristas la figura del vicepresidente Daniel Scioli, que aprovecha las desconfianzas e indecisiones. La unidad tras una lista de diputados parece un milagro. Y no tienen ningún candidato que tenga ganas de bajar al distrito.

Rafael Bielsa es, en la Ciudad, el candidato natural del kirchnerismo, por tiempo invertido en los medios para instalarlo, por imagen positiva, por confianza del Presidente y porque es el que menos entredichos genera entre el resto de los dirigentes del distrito. Sin embargo, además de que resistirá para no ser él quien pelee por un puñado de bancas, no le agrada la idea de ir en una lista con el ibarrismo y el justicialismo, sin un armado propio que lo sostenga.

En ese contexto, un grupo de bielsistas del Movimiento de la Militancia organiza un nuevo armado por izquierda, al que no pertenecerá el partido GESTA (Gestión Estado y Sociedad, Todos Ahora), que preside el mismo Bielsa y tiene como referentes al jefe de Gabinete de la Cancillería, Eduardo Valdés; al secretario de Culto, Guillermo Oliveri, y en Capital, al diputado Milcíades Peña.

El nuevo partido en construcción, que se podría llamar Propuesta Popular, estaría integrado por el Movimiento de la Militancia Social, el Movimiento de Trabajadores Desocupados (MTD) Evita, de Emilio Pérsico; la Mesa de Agrupaciones Kirchner Presidente, del director del Onabe (Organismo Nacional Administrador de Bienes del Estado), Fernando Suaréz; y los diputados de la Corriente Peronista Federal, integrada entre otros por Rubén Daza (Jujuy), Juan Manuel Irrazábal (Misiones), Hugo Perié (Corrientes), José Mongeló (Chaco), Estela Córdoba (Tucumán) y Graciela De la Rosa (Formosa).

La agrupación está en plena recolección de firmas para ser reconocida como partido. No obstante, ya inauguró un local sobre la calle Agüero, el 22 abrirá otro en Lugano y a principios de noviembre un tercero en Mataderos.

Los miembros del Movimiento de la Militancia Social apoyarán la participación del MTD Evita en el armado que integran el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Eduardo Luis Duhalde; los diputados nacionales Miguel Bonasso y Francisco "Barba" Gutiérrez; y las agrupaciones piqueteras Barrios de Pie, de Jorge Ceballos, Frente Transversal Nacional Popular, de Edgardo de Petri; y la Federación Tierra y Vivienda (FTV), de Luis D’Elía. Sin embargo, por diferencias con ellos, el Movimiento de la Militancia Social no será parte de esta construcción política.

Desde este sector del flamante partido bielsista sostienen que, en realidad, el armado de Bonasso es una alianza para hacer conferencias de prensa y que no tienen candidato porque nadie quiere serlo, excepto por De Petris, que estaría analizado la posibilidad de presentarse él o de colar a alguien de su confianza en la lista. Lo cierto es que los bielsistas, por lo bajo, se quejan de que su líder tenga que dejar el coqueteo internacional: "Ya que a (Eduardo Luis) Duhalde le gusta hacer conferencias de prensa, por qué no baja él", dicen.

Y si nadie quería ser candidato antes de la encuesta de Artemio López -en la que el mejor candidato K, Rafael Bielsa, está tercero detrás de Carrió y Mauricio Macri-, ahora mucho menos. "Alberto Fernández, echando a correr el rumor de que Cristina (Kirchner) podía jugar en la Capital Federal como en la Provincia, homologó ambas elecciones, como si para el Presidente tuvieran el mismo peso", disparó un bielsista.

"Es lo mismo que le está pasando al PT (Partido de los Trabajadores) en San Pablo -añadió-. Obtuvo más votos que en la anterior elección, pero no se nota porque se equivocó al darle tanta importancia a un solo municipio".

"Dijo que iba a resolver el tema del PJ y no lo está haciendo", le achaca otra fuente bielsista al jefe de Gabinete. Tampoco faltan dardos para el ibarrismo, sector al que -más aún luego del encuentro de La Boca- ven como posible traidor, y del que sospechan que lanzará en breve al vicejefe de Gobierno, Jorge Telerman.

"No pelearse con los progresistas no es de progresista, es de posmoderno", manifestó un funcionario que suele viajar por el mundo. Es que a los bielsistas no les gusta nada la posibilidad de que Ibarra, quien se autodenomina aliado del Presidente, pueda llegar a coquetear con Carrió, de quien ya temen que será la figura a vencer en la Ciudad no sólo en los comicios del 2005, sino también en los del 2007.

Te puede interesar

Qué se dice del tema...