Desde las nueve de la mañana de este lunes 22, la Guardia Urbana participo junto a la Policía Federal y la dirección de Seguridad Vial de operativos de control y prevención de tránsito tanto vehicular como peatonal, en las esquinas del centro porteño.
Estos operativos son posible por la incorporación de 100 nuevos agentes a Guardia Urbana. A lo largo del año seguirán sumando más personal a los actuales 400, por lo que el gobierno Comunal proyecta llegar antes de fin de año a 800 guardias.
El operativo se desarrolla de lunes a viernes de 9 a 13.30 y de 14.30 a 19 en trece esquinas del macrocentro. En cada esquina se dispone de equipos de tres guardias con un móvil de apoyo cada tres esquinas, una moto policial y un fiscalizador de la dirección de Seguridad Vial.
El objetivo es prevenir e informar a los ciudadanos sobre el marco legal y el riesgo que conlleva la violación de las normas de tránsito. Sin embargo, existe la posibilidad de la sanción mediante el labrado de actas, función que cumplirá el personal de la Seguridad Vial.
Este lunes cuando el semáforo se puso en rojo en Corrientes y Callao, un guardia controló el correcto cruce de los peatones. Los otros dos guardias recorrieron la fila de autos controlando el uso de cinturones y celulares, sugiriendo a aquellos que estén incumpliendo la norma a modificar su conducta. De igual forma se actúa con el uso de cascos por parte de los motociclistas. En caso de que no respondan a las advertencias, se realizarán multas.
“La ampliación de la cantidad de integrantes y las funciones de la Guardia Urbana busca fortalecer la presencia del Estado en la vía pública y, de este modo, brindar una mayor seguridad a los vecinos de la Ciudad. En esta segunda etapa, sumamos recursos e infraestructura para complementar el trabajo policial de control de tránsito, como la fiscalización del respeto a los semáforos, el uso de cascos y cinturones de seguridad, el control de la alcoholemia, y el correcto cruce de los peatones”, afirmó el jefe Comunal, Aníbal Ibarra.
Por su parte, el subsecretario de Seguridad porteño, Claudio Suárez. afirmó: “Con la actuación de la Guardia Urbana en tránsito queremos consolidar una acción del Estado porteño que, desde la prevención y la disuasión, genere cambios de conducta para reducir riesgos viales. Convencer, disuadir y eventualmente sancionar para que todos asumamos una actitud responsable en relación al tránsito".
Los puntos de control elegidos son esquinas que poseen un fluido importante de transito peatonal y que por ese motivo tienen rejas para que los peatones no crucen por las esquinas.
Algunas intersecciones de calle donde se realizaron los operativos durante la mañana hasta principios de la tarde son: Corrientes y Callao; Corrientes y Carlos Pellegrini; Corrientes y Pueyrredón; Entre Ríos e Hipólito Irigoyen; Santa Fe y Pueyrredón; Santa Fe y Carlos Pellegrini, y Santa Fe y Callao.
Desde las 14.30 hasta las 19 las tareas de la Guardia Urbana se desarrollan en: Rivadavia y Pueyrredón; Córdoba y Pueyrredón; Libertador y Maipú; Callao y Las Heras; Callao y Libertador, y Libertador y Cerrito.
Un comunicado elaborado por el Ejecutivo porteño advierte que los puntos de control se va a ir cambiando periódicamente.
Desde su puesta en marcha el 13 de junio, la Guardia Urbana intervino con su presencia efectiva "en 7538 sucesos en la vía pública, registrando un promedio diario de 125 intervenciones. 7023 sucesos tuvieron su origen en la tarea preventiva de oficio, y 515 provinieron de eventos recibidos vía 103, la línea de emergencias. Además, la Guardia Urbana participó en 42 eventos de concurrencia masiva y realizó 2537 controles de alcoholemia", informó un comunicado del área a cargo de la Guardia Urbana.
Este es un ejemplo concreto de actuación:
Un accidente en el subterráneo, que sucedió en Rivadavia y Espinosa, el 7 de agosto, se arribó al lugar y se encontró caños de agua rotos y cables de luz expuestos y notificó a la empresa responsable de su reparación.
La política planteada por el Gobierno porteño es que los integrantes de la Guardia Urbana no porten armas de ningún tipo y que no integren ningún organismo de las fuerzas de seguridad ni de inteligencia. Aunque si están capacitados para convocar a las tradicionales fuerzas de seguridad como Policía Federal.
El cuerpo cuenta con 30 camionetas, bicicletas, equipos de comunicación y funciona coordinadamente con las fuerzas de seguridad, Bomberos, SAME y otras dependencias del Estado.
Todos los guardias urbanos han terminado la escuela media, tienen entre 21 y 35 años y recibieron una capacitación que incluyó aspectos técnicos, sociales y de protección y promoción de derechos.