El secretario general de la Unión Tranviarios Automotor, Roberto Fernández, aseguró que la adesión al paro de los trabajadores que representa fue “del cien por cien”.
Paralelamente, Fernández se mostró en desacuerdo con la proliferación de piquetes en la circunvalación de la ciudad. Las calificó como “una presión” contra quienes desean trabajar, contrariamente a la intención de la central obrera, que plantea que las personas que quieren ir a trabajar, lo hagan “a voluntad”. El gremialista expresó que “la Confederación General del Trabajo (CGT) anunció que no comparte ninguno de los piquetes“, aunque en realidad no hubo ninguna declaración oficial de la conducción al respecto.
Fernández consideró además que el presidente de la Nación, Mauricio Macri debe convocar a “empresarios, sindicatos y a la Iglesia”, porque consideró que “el país se está dividiendo, mañana el presidente tiene que sentarse a una mesa con nosotros y otros sectores sociales”.
“El presidente tiene que convocar mañana a los gremios, a los empresarios y a la Iglesia para que colaboren para cambiar todo esto”, urgió.
Por otra parte, el titular del gremio de los colectiveros convocó a desarrollar “un proyecto nacional, que incluya políticas de Estado vinculadas al trabajo, la producción, la salud y la seguridad“.
Finalmente, Fernández manifestó que el paro “no es ninguna alegría”, porque desde el movimiento obrero “lo que estamos buscando es trabajo y tener un salario digno”.
En una realidad paralela, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich aseguró que su objetivo es “garantizar que la gente que quiera, pueda ir a trabajar”, para lo cual las fuerzas de seguridad se encuentran reprimiendo a los piqueteros que cortaron algunos accesos a la Capital.
“Estamos garantizando que la gente pueda llegar a su trabajo”, deslizó, en declaraciones a algunos canales de televisión. Explicó que para ello Gendarmería Nacional se encuentra aplicando el protocolo antipiquetes en la Autopista Panamericana a la altura de su cruce con la Ruta 197, en la zona de General Pacheco.
La ministra manifestó que “se les advirtió a los manifestantes que queremos que liberen la Panamericana, que dejen circular a la gente y ahora se pone en marcha el protocolo de la Gendarmería y, si no responden, actuarán. Actuar significa desalojar, para que la gente pueda trasladarse, no solo por las vías laterales, sino por la vía central“, precisaba, mientras comenzaban a diseminarse los gases lacrimógenos en la Ruta Panamericana.
Bullrich aceptó que la situación es “compleja” por la multiplicidad de cortes en las autopistas y avenidas de ingreso a la Capital, pero destacó que “con un trabajo duro y complejo se está haciendo lo mejor”.
Finalmente, la funcionaria reconoció las limitaciones que implica su función, al reconocer que lo único que puede hacer es que “la gente que quiere ir a trabajar, pueda llegar”.
