La Nación, la Ciudad y delegados de los vecinos de las villas 31 y 31 bis de Retiro firmaron hoy, en la Legislatura porteña, un dictamen para la urbanización del asentamiento, donde habitan unas 30 mil personas, y que contempla mejoras en las viviendas y obras de infraestructura para dar los servicios de agua, gas, luz y cloacas y prohíbe los desalojos.
El dictamen fue acordado en el marco de una reunión de la denominada ?Mesa de Gestión y Planeamiento Multidisciplinaría y Participativa para la Urbanización de las villas 31 y 31 bis?, las que dejarán de tener esa denominación y pasarán a llamarse Barrio Carlos Mugica, en honor el cura
asesinato en 1974.
El entendimiento se dio tras 14 meses de la Mesa en distintas comisiones, de las que participaron funcionarios nacionales y porteños, legisladores de la Ciudad y nacionales, así como fue fundamental la guía que aportó el equipo técnico de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Buenos Aires,
que diseñó el plan de urbanización y radicación.
Sin embargo, en la reunión que se extendió por más de tres horas en el salón Presidente Perón de la Legislatura existieron pedidos por parte de algunos vecinos, sobre todo los de la zona Güemes, para prorrogar la firma del dictamen al menos dos meses a fin de ?pulir el proyecto? dado que ?algunos
aún no lo tienen muy en claro?, según manifestaron.
El planteo fue desestimado por el resto de los habitantes presentes en el encuentro, quienes deslizaron que la negativa a firmar el texto en cuestión correspondía a ?aquellos que no quieren que se les corte el curro que tienen porque gestionan el agua y la luz a través de coimas?, según afirmó Elvira, vecina del lugar.
Asimismo, fuentes de la Legislatura informaron que este dictamen se convertirá en una herramienta parlamentaria para la presentación de nuevos proyectos en pos de la ejecución de la urbanización.
No obstante, el avance de la urbanización quedará supeditado de los Ejecutivos porteños, que tendría a su cargo las obras; y del Nacional, que deberá ceder los terrenos ferroviarios en donde, en parte, se emplaza el asentamiento.
Puntualmente, la iniciativa plantea como zona para urbanización al polígono situado entre la Calle 4, las vías del ferrocarril San Martín, prolongación virtual de la Calle Juan Antonio Bibiloni, Calle 9, Avenida Presidente Ramón S. Castillo, Calle Prefectura Naval Argentina y Gendarmería Nacional.
También prevé la elaboración de proyectos para viviendas nuevas, programas de mejoras sobre manzanas consolidadas, obras de infraestructura, edificios de equipamiento comunitario y un plan de accesibilidad y transporte.
En tanto, plantea relocalizaciones dentro del barrio para los casos de asentamientos que no pueden consolidarse, como lugares de riesgo, cuestiones proyectuales o situaciones de hacinamiento.
Sin embargo, advierte que en este tipo de situaciones ?se deja establecida la prohibición de desalojos forzosos, teniendo que consensuar con los vecinos cada solución habitacional definitiva?.
La diputada de la Coalición Cívica Rocío Sánchez Andía, quien presidió las reuniones de la Mesa, consideró la firma del dictamen como ?un hecho histórico para el avance de la urbanización? y añadió que ?el trabajo hecho es un proceso modelo para que sigamos trabajando en la urbanización de las
tantas villas que hay en la Ciudad y para que los ciudadanos que están allí puedan vivir dignamente?.