Durante nueve días la Ciudad se llenó de Tango

Durante nueve días la Ciudad se llenó de Tango

Pese al inestable clima, este domingo un Obras Sanitarias a pleno vibró al ritmo del dos por cuatro en el cierre del V Festival de Tango de la Ciudad de Buenos Aires. Entre las atracciones que pudo disfrutar el público de todas partes del mundo, que hizo de este festival un éxito, se cuentan la final del Mundial de Tango de Salón y las presentaciones en vivo de la Orquesta de Beba Pugliese y del Sexteto Mayor, grupo encargado de cerrar el evento. Mientras que el secretario de Cultura porteño, Jorge Telerman, fue ovacionado por los presentes, el jefe de Gobierno de la Ciudad, Aníbal Ibarra, tuvo que soportar silbidos y abucheos


Muy buena concurrencia de público, excelente organización y una oferta de espectáculos de primer nivel fueron las particularidades que caracterizaron al V Festival de Tango de la Ciudad de Buenos Aires, que se llevó a cabo del 1 al 9 de marzo. El cierre de esta ambiciosa apuesta del Gobierno de la Ciudad, organizada por la Secretaría de Cultura porteña, se llevó a cabo el domingo a las 20 en el estadio de Obras Sanitarias, con la impecable conducción de Esteban Morgado.

La cumparsita, Pollito de Canaro, El choclo, Danzarín, La Beba, Todo, La mariposa y Tanguera fueron algunos de los tangos con los que orquestas en vivo deleitaron a las personas que llenaron, pese al mal tiempo y el calor agobiante, el estadio de Obras Sanitarias. Allí se presentaron la Orquesta Típica Los Reyes del Tango, y Beba Pugliese y su Orquesta con los cantantes Isabel Mendoza y Darío Vitale.

Otra de las presencias que generó una gran respuesta del público fue la presentación de la Orquesta Escuela de Tango, dirigida por Emilio Balcarce. Esta orquesta, que fue creada por la Secretaría de Cultura porteña, se ha presentado desde sus comienzos en los más importantes escenarios porteños, incluido el Teatro Colón.

En lo que respecta a la danza, bailaron María y Carlos Rivarola con su grupo de tango danza; Ezequiel y Sabrina; y Milena Plebs y Ezequiel Farfaro. Cabe una mención especial a la sumamente aplaudida presentación de la pareja formada por Gaspar Godoy, de 19 años, y Gisela Galeassi, de 20, jóvenes cordobeses que se consagraron campeones mundiales en la categoría "tango escenario" luego de un vibrante desempate frente a una pareja de bailarines porteños del teatro Metropolitan.

Pero entre las atracciones que se pudieron disfrutar, sin duda la que más expectativas generó en la audiencia fue la final del Primer Mundial de Tango de Salón. Luego de disfrutar de las 33 parejas finalistas -se presentaron 156, que representaron a 88 ciudades de todo el mundo- se dio a conocer a las diez parejas que disputarían la gran final. De ellas, luego de una larga deliberación por parte del jurado, salieron los primeros campeones mundiales de Tango de Salón: Enrique Usales y Gabriela Sanguinetti, quienes habían resultado campeones metropolitanos el año pasado.

La Primera Mención fue para una pareja de alemanes, Enrique Grahl y Judith Zapatero, de Stuttgart, mientras que la segunda fue para Jorge Damián Mariño y Graciela Trapanotto, de San Justo. Las menciones fueron entregadas por el secretario de Cultura porteño, Jorge Telerman, quien fue ovacionado por el público, y por el presidente de la Asociación de Maestros, Bailarines y Coreógrafos de Tango Argentino (AMBCTA), Carlos Rivarola. Los principales ganadores de la noche recibieron su premio de manos del jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Aníbal Ibarra, el cual debió soportar silbidos y abucheos por parte de los presentes.

Promediando el cierre, Morgado agradeció especialmente a los padrinos del festival -Carlos Rivarola, Jorge Waisburd, Ignacio Varchausky, Mora Godoy, José Libertella, y Víctor Hugo Morales- a la AMBCTA, a la impecable organización y producción del evento y al público "que hizo de esta fiesta del tango un éxito".

El broche de oro de la velada fue la presentación del Sexteto Mayor, que realizó un homenaje a Carlos Gardel con un popurrí de los temas que más lo caracterizaron, y ofrecieron una selección de las canciones más emblemáticas del tango argentino.

Sus integrantes se manifestaron "orgullosos de tocar en nuestra casa" e instaron a los bailarines y al público presente a demostrar en la pista instalada frente al escenario que "en Buenos Aires se baila mejor el tango que en cualquier lugar del mundo". Y así lo hicieron.

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