El PRO reforzó su mensaje original de “cambio”, sobre todo en temas vinculados a la economía. En la recta final de las elecciones y con Sergio Massa pisándole los talones, Cambiemos intenta posicionarse nuevamente como el verdadero frente opositor y salió a marcar diferencias con el Gobierno nacional en un punto esencial: el manejo de los asuntos económicos.
Quien se alzó como vocero de estos temas por parte del frente que componen la Coalición Cívica, el PRO y la UCR fue el presidente del Banco Ciudad y uno de los economistas principales de Macri, Rogelio Frigerio. “Haríamos todo distinto” en términos económicos, sostuvo.
Frigerio, quien en su momento se lo mencionó como posible vice de Macri antes de la elección de Gabriela Michetti, prometió una fuerte baja de la presión fiscal, con el foco puesto en las economías regionales, y la baja de la inflación a partir de reducir la emisión monetaria que, a su entender, se usa para “financiar la mala gestión, la corrupción y el subsidio a los ricos”.
El economista desarrollista fue más allá y dijo a FM Blue que la economía argentina ya está “ajustada” porque “hace cuatro años que no crece” y que si se recupera la confianza “vamos a poder disimular que el mundo ya no nos ayuda como en estos 10 años” de altísimos precios de las commodities y una demanda de Brasil en alza.
El presidente del Ciudad se quejó porque “Argentina tiene una de las inflaciones más altas del mundo”, lo que atribuyó a “errores propios de gestión” y priorizó “volver a crecer”. Aunque para ello, enfatizó, “hay que hacer cambios”.