Los ministros de Hacienda, Nicolás Dujovne y de Interior, Rogelio Frigerio, irán a Washington para participar de la reunión del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional que se llevará a cabo entre el 12 y el 14 de abril. Frigerio se concentrará en reuniones con el Banco Mundial y Dujovne llevará las negociaciones con el Fondo.
Viajan con una agenda signada por las necesidades que impone el cronograma electoral: liberar fondos para la obra pública y garantizar la estabilidad cambiaria hasta octubre.
La Casa Rosada necesita acordar una flexibilización en el acuerdo negociado para tener más margen de maniobra.
Dujovne va a decirle a Lagarde que sin flexibilidad en materia cambiaria y en materia de obras, el FMI le está regalando la elección a la oposición a Cambiemos, en especial a Cristina Kirchner, incrementando las probabilidades de reestructuración de la deuda o incluso cesación de pagos, un tiro por la culata.
El viaje se dará luego que el directorio ejecutivo del Fondo Monetario Internacional aprobó el jueves un nuevo desembolso de 10.800 millones de dólares que llegarán los próximos días al Tesoro y darán un alivio financiero al Gobierno.Es el tercero de un total de 57.600 millones del acuerdo stand by.
En un comunicado difundido tras la reunión, que comenzó cerca del mediodía y duró una hora y media, la directora gerente del Fondo, Christine Lagarde, dijo que “las políticas de las autoridades que sustentan el acuerdo respaldado por el FMI están dando fruto” y que el déficit fiscal y de cuenta corriente “están disminuyendo”.
Agregó que la actividad económica se contrajo en 2018, pero “hay indicios de que la recesión ha tocado fondo, y se espera una recuperación gradual en los próximos trimestres”.
También advirtió sobre la política para bajar los precios: “Los resultados en términos de la inflación han decepcionado”.
Lagarde hizo una advertencia sobre los precios: “La inflación sigue siendo elevada; las expectativas inflacionarias están aumentando y la inercia inflacionaria resulta difícil de quebrar”. Agregó que “tras unos meses de relativa estabilidad, la volatilidad financiera ha repuntado en las últimas semanas, dado que las condiciones financieras mundiales se han tornado menos favorables y los resultados en términos de la inflación han decepcionado”.
Lagarde avaló la política monetaria del Banco Central. El FMI en el reporte de su staff que difundió luego de liberar el tramo de USD 10.800 millones para la Argentina dijo: “Las elecciones de Octubre representan el riesgo más visible en el corto plazo, cuando se conozcan los candidatos, el 22 de junio, se podría despertar ansiedad en el mercado y potencialmente alimentar una dolarización y fuga de capitales más grandes de la esperada que debilitarían el peso y crearían preocupación sobre la dinámica de la deuda y el financiamiento”.
Con el desembolso aprobado, ya suman 38.900 millones de dólares los otorgados por el organismo, de un total previsto de 57.600. Según lo programado, el FMI daría 51.200 millones hasta diciembre, cuando se vence el mandato del presidente Macri.
El dinero aprobado llegará en un par de días hábiles a las arcas del Tesoro. El trámite suele demorar solo un par de días hábiles por lo que entre martes y miércoles el dinero llegaría al Tesoro.
El Gobierno también podrá licitar los 60 millones de dólares diarios, una medida que acordó recientemente con el organismo, lo que servirá para bajar las tensiones cambiarias en tiempos electorales.Y el Tesoro se comprometió a vender dólares en el mercado cambiario con el objetivo de asegurar que no haya otra escalada cambiaria. Pero con 60 millones diarios en un mercado de 600 millones diarios no bastaría.