El exvicegobernador bonaerense, Gabriel Mariotto, se sumó al grupo de dirigentes del Frente de Todos que no ocultaron su enojo con la Cancillería, a cargo de Felipe Solá, por “el cambio en la política exterior de nuestro gobierno”.
“Dar explicaciones de la posición argentina me da un poco de vergüenza”, dijo en una entrevista con Noticias Urbanas. El dirigente vinculó el giro de la Casa Rosada con el arranque de la negociación con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
El también extitular del Comfer, quien no integra la gestión de Fernández y responde al gobernador de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, pidió que el Frente de Todos genere un ámbito de discusión interno.
-¿Está molesto con la decisión del Gobierno de respaldar la condena de la ONU a las violaciones de los derechos humanos en Venezuela?
-Estoy triste por el cambio en la política exterior de nuestro gobierno. También estoy con vergüenza, porque tengo relaciones de afecto y políticas en toda América Latina. Dar explicaciones de la posición argentina me da un poco de vergüenza. Después, con todas las fuerzas para salir a construir alternativas, con los que están en la misma postura que estamos asumiendo nosotros, veremos qué hacer.
-¿Las diferencias por Venezuela pueden generar una fisura en el Frente de Todos o un problema interno grave?
-No, el frente tiene matices. Y es un abanico de expresiones. Lo que no tiene el frente electoral es una discusión política sólida y estamos proponiendo hacer esa discusión. Nadie va imponer una visión de sector, pero sí queremos discutir los ejes de construcción política y la dirección para aportarle al Gobierno. Después de nuestro frente está el neoliberalismo y lo que vivió la Argentina durante los últimos cuatro años. Las cuestiones internas las vamos a resolver en el frente.
-¿El giro tiene que ver con el arranque de la negociación con el Fondo Monetario Internacional?
-Creo que sí. Cuando un gobierno endeuda furiosamente, como lo hizo Mauricio Macri, la negociación trae aparejada situaciones económicas feas y condicionamientos de orden político. Interpreto que el condicionamiento político de la negociación trae aparejado la posición de la Cancillería argentina. Nosotros estamos en contra de la negociación de la deuda. Entendemos que primero hay que auditar, como dijo Alberto Fernández en el debate con Macri. Eso hay que activarlo. La negociación trae aparejados condicionamientos políticos y estamos frente a uno de ellos.
-¿Coincide con Alicia Castro en que la Argentina debería haber votado como México?
-La posición histórica de la no injerencia y la no intervención, la doctrina Drago, ameritaba una posición distinta. No sé si votar con México, pero no había que hacerlo con el Chile de Sebastián Piñera ni con el Brasil de Jair Bolsonaro. Eso es una situación fea.
-Dice que no cree que esto genere una interna, pero ya renunció Alicia Castro y desde Hebe de Bonafini, Mario Secco hasta Juan Grabois salieron a criticar al Gobierno.
-Tenemos diferencias con esta posición y estamos enojados con esta situación. También estuvimos en desacuerdo con la deuda, por negociar sin discutirla y auditarla, pero tenemos la responsabilidad de activar un programa y un plan en donde se discutan las políticas. Y vamos a agotar las instancias para que el frente discuta sin que nadie imponga nada. Queremos discutir. El frente político tiene que construirse, no solamente ser el recuerdo del frente electoral. Por eso, es importante la discusión interna.
Tenemos la responsabilidad de activar un programa y un plan en donde se discutan las políticas. Y vamos a agotar las instancias para que el frente discuta sin que nadie imponga nada. Queremos discutir. El frente político tiene que construirse, no solamente ser el recuerdo del frente electoral. Por eso, es importante la discusión interna.
-¿Espera un llamado de Alberto Fernández a Nicolás Maduro, como dijo Luis D’Elía?
-No tengo idea, no estoy en el gobierno y no tengo conocimiento al respecto.
-¿Y aguarda un pronunciamiento de la vicepresidenta?
-No espero nada. Solamente opinamos porque tenemos ideología y pertenecemos a una fuerza que aportó mucho para el triunfo y no nos mimetizamos con ningún espacio. Tenemos nuestra propia identidad.
-¿Por qué deben haber elecciones internas en el PJ, como pidió Alberto Rodríguez Saá?
-Comparto con Alberto la posición de exigir que haya elecciones internas. Eso siempre es edificante. Hay que presentar programas y llevar adelante la democracia interna. Fortalece mucho al Partido Justicialista. Me enrolo en la postura del Alberto.
-¿Una interna partidaria en medio de la crisis?
-Cuando sea el momento que se puedan llevar adelante. Atenta más contra el partido que haya lista única, sin debate. Hay que ensanchar la discusión del frente, eso fortalece mucho a las instituciones y partidos políticos.
-¿Está de acuerdo con la convocatoria virtual del 17 de octubre o hubiese preferido una movilización callejera?
-Está bien todo lo que se haga. No se pueden obviar las elecciones internas. Hay muchos sectores que tienen opinión y quieren elecciones.