El hecho de inseguridad vivido en el hospital Rivadavia que desencadenó en un paro por parte del personal no médico de la institución, enrolado en el gremio opositor al gobierno porteño, ATE, sigue trayendo cola. Luego de que la ministra de Salud de la Ciudad, Graciela Reyabaud, condenara la actitud del sindicato y destacara la posición de la Asociación de Médicos Municipales de no parar, el titular de dicha entidad, Jorge Gilardi, dialogó con Noticias Urbanas sobre esta situación.
Antes que nada, Gilardi destacó que “los médicos municipales no están de paro” y “la pauta está que están trabajando todos los hospitales de la Ciudad”. En tanto que dio su versión de los hechos y las razones que lleva a Médicos Municipales a tomar esta postura.
“Hubo una agresión hacia el equipo de salud por parte de dos personas que llegaron a la guardia. Aparentemente estaban bajo la acción de algunas sustancias, y tomaron unas jeringas y unas agujas que estaban usando y amenazaron al equipo de salud. A partir de ahí, un sector gremial que no es médico decidió hacer un paro. Son decisiones políticas y gremiales de ellos, nosotros no acompañamos ese paro porque hemos hecho los paros en los momentos que había que hacerlos y, nosotros, los paros los decidimos entre todos”, indicó.
Asimismo, el presidente de Médicos Municipales afirmó que “de estos hechos, lamentablemente, hay todos los días”. “Por lo que tendríamos que estar de paro todos los días. Nosotros, el gremio, lo usamos para construir, no para destruir. Y no nos metemos en ningún tipo de política partidaria, sino política gremial. Así que estamos trabajando, simplemente, para que nuestra gente esté mejor, esté cuidada, como lo venimos haciendo hace años”, se diferenció de ATE.
“De promedio, en la Ciudad, hay de 40 mil a 50 mil consultas diarias. La verdad es que por dos personas que estaban en muy mal estado, que hicieron lo que hicieron esa noche, que es gravísimo, nosotros no podíamos hoy martes, ni el lunes, hacer un paro de 24 horas y dejar a la gente sin hospital, cuando nosotros ya venimos trabajando intensamente en cuidar al que cuida y proteger al equipo de salud de cualquier agresión”, argumentó Gilardi.
Consultado por NU sobre quién tiene la responsabilidad por los hechos de inseguridad que se viven a diario en los hospitales públicos, Gilardi respondió: “La responsabilidad la tienen las fuerzas de seguridad, ya sean nacionales como locales. Estaba la Federal, la retiraron por una cuestión equis. La Metropolitana estuvo, es insuficiente. Hay fuerzas de seguridad privada que nos ayudan a custodiar. Nosotros creemos que todas esas fuerzas deberían juntarse y darle seguridad al hospital público”. “Nosotros no estamos pidiendo ninguna cosa estrafalaria, solamente estar tranquilos”, añadió.
“Cuando hablamos con la Metropolitana, nos dicen, a veces, que hay insuficiencia de personal. Nosotros firmamos un protocolo de seguridad, pero de la forma de cumplimiento se tienen que fijar las fuerzas que conocen el tema. Yo soy médico y uso guardapolvo blanco, y lo voy a seguir usando”, aseveró Gilardi, al tiempo que opinó: “Las fuerzas de seguridad se tienen que cubrir entre ellas, y en vez de estar disputando quien nos cuida -si uno vestido de azul o uno vestido de verde- lo que tienen que hacer es cuidarnos”. “El protocolo ha ayudado, ha mejorado la seguridad en los hospitales, pero aún es insuficiente como queda demostrado”, remató.
Sobre su posición con respecto a ATE, Gilardi evitó la polémica pero dejó en evidencia que las relaciones no son las mejores: “Yo no voy a opinar sobre decisiones gremiales de ese gremio, que sí opina de nosotros. Cada uno atiende lo suyo, nosotros estamos muy tranquilos. Y hoy se decidió trabajar, eso sí, siempre tratando de aumentar las medidas de seguridad para tratar de cuidad al que cuida”.
“Espero que toda la sociedad recapacite sobre este tema, porque no sólo es un tema del equipo de salud. Si la sociedad agrede al equipo de salud, se muerde la cola. Nosotros lo que queremos es que nos cuiden, no usar un chaleco antibalas”, razonó Gilardi, quien concluyó manifestando que “los médicos no nos vamos a acostumbrar a la violencia, vamos a seguir luchando contra eso”.
