Los gobernadores peronistas se reunirán el martes en la Ciudad para analizar los pasos a seguir ante el inédito escenario que planteará a la asunción de Javier Milei. En repliegue y todavía golpeados por la derrota de Sergio Massa en el balotaje, los mandatarios intentarán unificar posiciones con el objetivo de erigir un bloque sólido de negociación frente a una gestión entrante con escasas estructuras legislativas y territoriales.
Además, se sumarán los jefes provinciales de fuerzas aliadas al oficialismo, como los entrantes Alberto Weretilneck y Hugo Passalacqua, de Río Negro y Misiones respectivamente.
Aparte del mitin, los dirigentes iniciaron ya los primeros contactos con La Libertad Avanza (LLA) a fin de plantear de forma individual problemas puntuales de cada distrito. El interlocutor de esa relación sería el futuro ministro del Interior, Guillermo Francos, la figura más avezada en el tema con la que cuenta la gestión venidera.
Rápido de reflejos, el salteño Gustavo Sáenz fue el primero en exhibir foto con Francos. “Me reuní con Nicolas Posse y Guillermo Francos, futuros Jefe de Gabinete y Ministro del Interior en el próximo gobierno nacional. Los felicité por los resultados electorales y les deseé el mayor de los éxitos. El voto es el instrumento más importante que tiene la democracia”, dijo Sáenz en un tuit.
Me reuní con Nicolas Posse y Guillermo Francos, futuros Jefe de Gabinete y Ministro del Interior en el próximo gobierno nacional. Los felicité por los resultados electorales y les deseé el mayor de los éxitos. El voto es el instrumento más importante que tiene la democracia. pic.twitter.com/X4EmIig7BG
— Gustavo Sáenz (@GustavoSaenzOK) November 23, 2023
Obra pública, plan “motosierra”, compensaciones por cambios en IVA y Ganancias y Coparticipación Federal son algunas de las inquietudes de los gobernadores por estas horas. En el caso puntual de Tierra del Fuego, se suma el futuro del Régimen de Promoción Industrial con el que cuenta la provincia.
Nuevo escenario
El retroceso del Partido Justicialista (PJ) no se produjo solo en la administración nacional sino también en el territorio. Este año el oficialismo perdió las gobernaciones de San Juan, Entre Ríos, San Luis, Santa Fe y Chaco en manos de Juntos por el Cambio (JxC).
También cayó derrotado en Santa Cruz -kilómetro cero del kichnerismo- frente al provincialista Claudio Vidal.
En paralelo tampoco pudo arrebatarle la Ciudad, Mendoza, Corrientes y Jujuy a la coalición amarilla. Así las cosas el año próximo el PJ administrará solo 9 provincias.
Tierra del Fuego (Gustavo Melella); La Pampa (Sergio Ziliotto); Buenos AIres (Axel Kicillof); Fomosa (Gildo Insfrán); Salta (Gustavo Sáenz); Catamarca (Raúl Jalil); La Rioja (Ricardo Quintela); Tucumán (Osvaldo Jaldo); y Santiago del Estero (Gerardo Zamora) son los distritos que continuarán en manos de administraciones peronistas.
Dentro de ese pelotón, Kicillof emerge como el gran accionista de un frente debilitado. El bonaerense fue reelecto por casi el 45% en el principal bastión del país y logró hacerse con numerosos municipios que estaban en manos opositoras.
Cabe destacar que Sergio Massa solo pudo imponerse en tres provincias: Buenos Aires, Formosa, Santiago del Estero y Chaco. En esta última, el final fue tan apretado que recién el ministro de Economía recién se impuso en el escrutinio definitivo.