El exsecretario de Culto de los gobiernos kirchneristas, Guillermo Oliveri, se alinea con la postura de Alberto Fernández respecto de la renuncia de Evo Morales a la presidencia de Bolivia. Mientras asegura que fue un golpe de Estado, afirma que el gobierno de Mauricio Macri evita catalogarlo de esa forma porque “sigue instrucciones de Estados Unidos”.
¿Cómo ve la situación en Bolivia?
-Lo veo con mucha preocupación, sin duda alguna, es algo inesperado lo que ha ocurrido estos treinta días en América latina, en nuestros países hermanos. En Bolivia hubo un caso claro de golpe de Estado, que no sabemos cómo va a terminar. Un gobierno que estuvo al mando por 14 años y que tuvo unos índices económicos muy altos y después con un despertar de la segregación y el racismo muy complejo. Y lo mismo está pasando en Chile desde otro punto de vista, con un despertar del pueblo chileno, que por décadas fue víctima de una política neoliberal y que por un mínimo aumento de un pasaje despertó esto que no para.
-¿Por qué inesperado?
-Tal vez se estuvo calentando a fuego lento. Está claro que hay un sector de Bolivia que nunca bancó a Evo Morales. Pero fueron 14 años, tres gestiones. De todos modos hubo un disparador, que tuvo que ver con las elecciones y aquel referéndum negativo para Morales. Y después, las elecciones. Y creo que en un escenario tan importante como América latina intervienen varias manos y otros brazos largos.
-¿Se refiere a Estados Unidos?
-Estados Unidos tiene una injerencia particular en la región, nadie lo duda, tiene una posición, como sabemos, respecto de Venezuela y otros países. Y tiene un aliado en nuestro hermano Brasil, que es el actual presidente, que sigue las políticas en ese sentido. Por eso nuestro presidente electo, Alberto Fernández, fue muy categórico al decir que lamentaba la posición del gobierno de Estados Unidos sobre avalar este golpe de Estado.
-¿Cree que este aval responde al interés con que haya en el poder grupos aliados que puedan tomar decisiones económicas o ambientales favorables a Estados Unidos?
-No hay dudas de que los intereses son económicos. Pueden terminar de coincidir en términos ideológicos. Y ese es el rumbo que cambió en América latina en los últimos cuatro años. Vamos a ver, porque esto es tan dinámico… Y también, en algunos puntos, tan explosivo, que habrá que ver cómo se desarrolla el escenario en América latina y en el mundo también. Creo que Alberto Fernández ha tenido mucha tarea y prudencia y muy buen diálogo para lograr que Morales pueda llegar sano y salvo a su destino de México y creo que Alberto va a ser un actor muy importante en América latina en los próximos años.
-¿Cómo quedará la conformación regional con la situación de un gobierno de derecha en Brasil?
-Convivir se tiene que convivir, más allá de las relaciones entre dirigentes, la relación de hermandad tiene que ver con los pueblos. No se puede cambiar una historia de paz e intercambio comercial, creo que va a ser una política pragmática. Estamos hablando de hombres que defiendan sus posiciones desde un marco de racionalidad, dependiendo de sus intereses, pero acordando que nos conviene a toda la región crecer en conjunto y no salvarse individualmente.
-¿Por qué hay sectores del Gobierno que relativizan el concepto de Golpe en Bolivia?
-Es una lineamiento que le sugiere Estados Unidos. Lo mismo ha hecho Bolsonaro. Lo cierto es que han desplazado a Evo Morales y que han ocurrido muertes de forma violenta. Y con una presidenta que se autoproclama en soledad. Peor no puede ser.
-¿Qué responsabilidad tiene Evo en todo esto, por las denuncias de fraude, por el no respeto al plebiscito…?
-Lo del fraude no está comprobado. La responsabilidad de la renuncia de Evo fue para evitar un baño de sangre. De haberse quedado, hubieran pasado cosas más graves. Lo demás es una cuestión de discusión del pueblo de Bolivia. Pero creo que las presidencias de Evo Morales han sido, para todos los analistas y, sobre todo, para el pueblo más marginado y el pueblo indígena, que es una población muy presente y real en la vida de Bolviva, el nivel de la economía ha sido más que virtuoso en estos catorce años de gobierno. Lamento que resurja la xenofobia que tienen todos los países y que sufre el pueblo boliviano.
-¿Va a ser el secretario de Culto?
-Hasta que no lo decida el canciller o el Presidente de la Nación, son todas versiones. No hay nada confirmado hasta que no sean los últimos días de noviembre. Mientras tanto, estamos todos a disposición, como corresponde.