El legislador porteño Gustavo Vera (Bien Común) continúa dando charlas sobre la Encíclica Papal Laudato Sí. El sábado último estuvo -invitado por, Sergio Ortiz, secretario de Vivienda del SEC- en el Sindicato de Comercio ante una nutrida concurrencia, compuesta por delegados gremiales del sindicato anfitrión, trabajadores de cooperativas y dirigentes sindicales de diversa extracción.
Ortiz abrió el evento señalando que el mes pasado “el centro de formación en el cual se desarrolla esta actividad es sostenido por el aporte exclusivo de los miembros de la comisión directiva” que trabajan con él en Viviendas, porque “consideramos que los cuadros sindicales no se compran en un Supermercado sino que hay que formarlos y darles herramientas para enfrentar a las patronales, que aprovechan que hoy gobierna la derecha para atacar nuestros derechos”.
Luego, el dirigente gremial destacó que “desde la Secretaria de Viviendas se viene trabajando en sintonía con Laudato Sí aún desde antes de conocerla. En ella se encuentra una herramienta fundamental para el trabajo sindical y territorial, que se verá materializado en los proyectos de viviendas para empleados de comercio en los que se está trabajando”.
Luego tomó la palabra el legislador porteño para señalar la escalada de violencia que existe en el mundo y el rol que el Papa Francisco cumple para que “el complejo militar industrial norteamericano, representado en Argentina por Durán Barba, Patricia Bullrich y Stiuso, no pueda generar guerras”.
Vera cuestionó a aquellos que dicen adherir a la prédica del Papa, en especial a “todos aquellos que firmaron el Pacto de San Antonio de Padua sólo para sacarse la foto”, destacando a continuación “la necesidad de que las centrales obreras, CGT y CTA, cumplan con el plan de acción acordado” en la multitudinaria marcha del pasado 29 de Abril.
Finalmente, ambos dirigentes coincidieron en que se debe realizar un nuevo “Pacto de Padua” con los dirigentes sociales y sindicales de la Capital Federal, apuntando a ser los catalizadores de los reclamos sociales existentes y al recambio generacional en los sindicatos.
