“Íbamos al país de la inversión y hoy va a ser el país de la inspección”, disparó Guillermo Dietrich, el padre del ministro de Transporte de la Nación, con quien comparte el mismo nombre, durante la apertura de la jornada “El comercio y el contexto político-económico 2019”, que se realizó en Córdoba.
El evento fue organizado por la Cámara Argentina de Comercio, donde Dietrich padre es el vice. Allí brindó un discurso de apertura donde no guardó críticas a la actual gestión de Mauricio Macri, en especial el rumbo de la economía.
El empresario adujo que el día anterior al discurso armó un ayuda memoria “con un dólar, y hoy hay otro”, y que además las dos multinacionales a las que representa su empresa “pararon toda la facturación; tenemos productos vendidos con un dólar a $43, y eso y ya no va más”.
“El acuerdo que firmé hace cuatro días -dijo en referencia al programa de Precios Esenciales- ¿es el mismo hoy con el dólar a $46? El consumidor y los mercados son sabios, no necesitan que nadie les diga dónde comprar”, analizó.
Dietrich afirmó también que el país sigue “sin moneda” y que la “transformación del Estado sigue atrancada”, conceptos que había dicho el año pasado y que aseguró que siguen igual. En esa línea reclamó a Macri que cumpla con su promesa de bajar la carga impositiva: cuando Argentina “tenga los impuestos que nos prometió el gobierno actual (…) podremos arrancar”. “Para ser competitivos, como quiere el Gobierno, no tenemos que tener impuestos distorsivos. Vayamos por ahí”, insistió.
El empresario confió en que el gobierno que integra su hijo “en algún momento tendrá más claras las cosas”, aunque también le reclamó que mejore la comunicación de cuestiones vinculadas a la gestión, como algunas obras. “La presidenta anterior estaba siempre en cadena… Tampoco desaparezcas de la cadena, tenés que estar un poquito”, recomendó.
Como era de esperarse, su hijo salió a responderle, a sabiendas de que esas críticas son el reflejo de un descontento social -y empresarial- mucho mayor:
“No coincido con algunas de las cosas que dijo, pero también entiendo en él, y en mucha gente, la ansiedad y la frustración de que esto no sea más rápido”.
Entrevistado en el programa Digamos todo, de CNN Radio, hizo un largo preludio antes de responder. “Es mi viejo, lo quiero mucho, profundamente. Le debo mucho a mi viejo y a mi vieja, y tengo la suerte de que los dos vivan porque son jóvenes. Me criaron, existo por ellos, me dieron hermanos maravillosos, me dieron una educación con todas las oportunidades y con mucho esfuerzo; mi viejo empezó muy de abajo y soy el primer profesional de la familia. Trabajé con mi viejo muchos años de mi vida, hemos discutido muchas veces, tenemos miradas totalmente distintas. En este caso no coincido con algunas de las cosas que dijo, pero también entiendo en él y en mucha gente la ansiedad y la frustración de que esto no sea más rápido. Claramente, quiere que los impuestos sean menores, que es lo que queremos todos nosotros, la cuestión es cómo hacemos eso. Lo que se pierde en perspectiva es la dificultad de este proceso, y que estos cambios profundos, como bajar los impuestos, requieren gastar menos en una Argentina que con el kirchnerismo multiplicó por dos el gasto público y sus impuestos. Estos cambios profundos no tienen resultados inmediatos y por eso no se han hecho”.
También le preguntaron al ministro si mantuvo contacto con su padre después de las críticas. “No hablé, me fui enterando y tuve un día en el que terminé a las nueve de la noche recorriendo la ruta (un nuevo tramo de la Autopista 8 en Solís), pero me mandó al chat familiar un audio de una entrevista con Chiche Gelblung donde le puso cierta perspectiva a lo que dijo, reconociendo que este es el Gobierno, que no hay que volver para atrás. Tanto él como mucha gente tiene críticas. Es como todo, como pasa a veces adentro del partido nuestro, a veces hay cosas que se expresan de una forma y yo las expresaría de otra forma, en otro lugar. Como habló mi viejo el otro día antes no se podía hablar. Coto dijo alguna cosa y lo destruyeron”, recordó Dietrich sobre la etapa del kirchnerismo.