La Conferencia Episcopal Argentina que dirige monseñor José María Arancedo emitió este martes un comunicado en el que se pronunció sobre la situación en la que quedó la Argentina luego de que la Corte Suprema de los Estados Unidos no aceptara la apelación del Gobierno al fallo favorable que obtuvieron los holdouts con Thomas Griesa. En la nota, los obispos abogaron por una “una actitud madura de unidad y responsabilidad” para negociar.
“Este hecho reclama con urgencia de toda la dirigencia una actitud madura de unidad y responsabilidad para responder, en una justa negociación, a la situación generada”, remarcaron.
En su reflexión, los prelados afirmaron haber “seguido con atención y preocupación pastoral” el tema. Y citaron al papa Francisco para advertir que la economía centrada sólo en la especulación financiera “debilita las relaciones, posterga el desarrollo de los pueblos y compromete la equidad del orden internacional”.
No obstante, expresaron su confianza en que “la buena disposición y la competencia profesional de nuestros dirigentes, fuerzas políticas, empresarios, economistas, gremialistas, pueda encontrar un ámbito de diálogo y de trabajo para dar solución a la situación planteada”.
“Vivimos momentos en los que, más allá de la justa diversidad de pertenencias políticas, la sociedad necesita y espera actitudes y compromisos que expresen la conciencia de ser una nación”, aseguraron, y recordaron que “el tema que nos ocupa pertenece a la vida del Estado argentino”.
Luego del revés de la Corte, el Poder Ejecutivo pidió al juez Griesa que suspenda los alcances de su fallo para negociar con los holdouts –”Queremos pagar al 100% de los bonistas”, dijo la presidente Cristina Kirchner el viernes. Los denominados fondos buitre solicitaron que se mantenga vigente la sentencia, pero abrieron un margen para dialogar.