Este miércoles 14 de junio a las 13:00 es recordado y homenajeado en el Salón Felipe Vallese, ubicado en el primer piso de la sede de la C.G.T., en Azopardo 802, el hermano Mauricio Silva, un religioso que fue desaparecido y asesinado por las patotas clandestinas de la última dictadura militar.
El acto será organizado por el legislador porteño Gustavo Vera, el secretario general del Sindicato de Camioneros, Pablo Moyano. Cerrará el acto el presidente del Club Atlético Independientey exsecretario general de los Camioneros y de la C.G.T. Hugo Moyano
En el salón, serán entregadas las placas en honor al religioso barrendero, en el día en que se cumplen 40 años de su desaparición. Las placas serán recibidas por Alicia Vázquez, exsecretaria de Cultos del Gobierno porteño, que además escribió el libros “Gritar el Evangelio con la vida”, sobre la vida del hermano desaparecido.
En la C.G.T. el Sindicato de Camioneros hará entrega a cada uno de los presentes una estampita de Silva que contendrá una poesía escrita por él, titulada proféticamente Morir en Soledad.
Luego, por la tarde, a partir de las 17:00 el cura villero que es además el capellán de los cartoneros, Lorenzo “Toto” Vedia, realizará una misa en el hall de la Estación constitución en homenaje a Silva, a la que están invitados los cartoneros y los barrenderos.
El diez de junio último, la Legislatura porteña aprobó un proyecto de homenaje al religioso, por iniciativa del legislador de Bien Común-La Alameda, Gustavo Vera. Es necesario destacar que anteriormente se estableció el 14 de junio como Día del Barrendero, precisamente en homenaje al día en que fue secuestrado el religioso.
Mauricio Silva fue un hermano que pertenecía a la Comunidad Hermanos De Foucault. Desarrollaba su actividad pastoral luego de su horario de trabajo, que desarrollaba desde el corralón de las Villas, situado en la calle Varela 555, en la Ciudad de Buenos Aires.
El 14 de junio de 1977, el hermanito Silva fue secuestrado en la esquina de las calles Magariños Cervantes y Terrero, en el barrio porteño de Villa General Mitre (quizás no casualmente, ya que éste fue uno de los mayores genocidas argentinos del Siglo 19) por una patota de la dictadura genocida.
De acuerdo con los registros de la Co.Na.Dep., durante el transcurso de la Dictadurs que impuso el Terrorismo de Estado como método represivo, resultaron asesinados y desaparecidos más de 80 religiosos católicos, que pagaron con sus vidas su opción por los más pobres.
Morir en Soledad
Señor, yo sé que tú estás
en la fe luminosa de una noche de estrellas,
de un día radiante de luz y de sol.
Yo sé que tú estás,
en la espera gozosa de un niño que viene,
de una carta que llega,
de un amigo que vuelve.
Tú estás.
Yo sé que tú estás
en el amor inmenso de unas manos que abrazan
y en el puro cariño del beso que me dan.
Más también sé que estás
en la fe desprovista y desnuda
cuando en un día y otro día
le cuenta su rutina de trabajo y pobreza
y mi alma se hunde en tibieza total.
Yo sé que tú estás
cuando la esperanza es cuesta empinada
la cumbre es incierta y las fuerzas muy pocas.
Tú estás.
Yo sé que tú estás
cuando amar es un surco humilde y oscuro,
que reclama al grano para ser fecundo
y morir en soledad.
Yo sé que tú estás, Señor, que te creo,
Señor, que te espero, Señor, que me amas,
yo sé que tú estás.
