“El tema de bosques y fuegos tiene prioridad cero. Es un tema que es una desgracia no solamente ecológica, sino humana. Así que que hay que reparar, mitigar y sobre todo prevenir. Y en esto ya se está trabajando transversalmente con otros ministerios. Lo que hay que hacer es tratar de prevenir. Evidentemente no lo hemos hecho bien”, aseguró.
En su primera intervención pública, al ser indagado sobre los incendios en el sur del país, afirmó que “hay labores que requieren no solo una previsión, sino también una asignación presupuestaria adecuada. Sin embargo, en muchas ocasiones los recursos no están disponibles en el lugar y en el instante que deberían estar”, destacó.
“Esto tiene mucha contingencia natural, como el rayo que en diciembre originó (un incendio) en los bosques naturales de la Patagonia. Eso es imprevisible. Totalmente. Eso ha sucedido también en en el circuito de California, donde ha arrasado miles de casas y en Argentina también. Así que todo eso hay que prevenirlo, pero hay que tener una alerta, yo diría brigadistas y alertas tempranas”, desarrolló.
El funcionario expresó admiración por su predecesora en el puesto. Manifestó que experimentó “una sobrecarga en sus responsabilidades debido a la posible falta de entendimiento de que la cuestión ambiental no es una cuestión ideológica, sino que se trata de un asunto completamente ecológico”.
“Es un derecho humano y una responsabilidad humana protegerlo y conservarlo, ya que es el lugar que habitamos, es el hogar en el que vivimos”, concluyó.
El terrorismo de la RAM
Respecto a los incidentes provocados por la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM), que este viernes fue catalogada por el Gobierno como una organización terrorista, Brom señaló que sus actos deben ser perseguidos y llevados ante la justicia.
“Esto ya no es una cuestión de derechos humanos. Justamente, después de un año en el INAI, he observado mucha manipulación en estos temas, no solo en relación al terrorismo, que es un asunto grave, sino también en el ámbito de la criminalidad, donde es necesario actuar. Diría que esto se ha ideologizado y politizado. Lo que inicialmente son derechos humanos se convierten en un negocio. La comercialización de la tala de árboles, la quema intencionada de bosques para alterar la apariencia de un área forestal y transformarla en una plantación agrícola… Eso debe ser perseguido con todos los recursos, tanto legales como judiciales”, detalló.