En el marco de la intervención que realiza el Gobierno Nacional en la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), ocurrió un hallazgo que tiene que ver con el atentado a la sede de la AMIA que tuvo lugar el 18 de julio de 1994.
En el operativo, se encontraron con más de 2.000 cajas de papeles y 5.000 escuchas en casette y videos en formato VHS que tienen relación con el lamentable suceso que se cobró 85 víctimas en la institución ubicada en la calle Pasteur 633.
Según se supo, este material había sido desclasificado en 2015 para que puedan ser utilizados por la Unidad Fiscal de Investigación que todavía hoy lleva adelante el caso. En ese entonces, el responsable de la fiscalía especial era el fallecido Alberto Nisman.
El hallazgo se conoció a través de la web Perfil.com y según informa esos archivos se encuentran en un edificio que está en pésimas condiciones y como tal esas pruebas que se encuentran en las cajas pueden estar en mal estado. La AFI se encuentra intervenida por decisión del presidente Alberto Fernández y como tal designó a la fiscal Cristina Caamaño quien, según se informó, pudo comprobar el estado del edificio y el riesgo que corren esas cajas de pruebas.
Los registros están rodeados de escombros, basura, vidrios rotos, paredes con humedad, conexiones eléctricas clandestinas y cables averiados.