“Vamos a tratar de asistir donde haya hambre, todo lo que podamos. Vamos a estar muy atentos al tema del hambre en la clase media. Ya nos pasó en pandemia, mucha gente de clase media que no está acostumbrada a pedir y necesitar comida, encontramos los mecanismos de llegarles con ese alimento sin exponerlos a que tengan que ir a pedir a algún lugar porque no están acostumbrados, no les es natural, pero es probable que esta crisis nos obligue a encontrar mecanismos para tender la mano”, dijo el jefe de Gobierno de la Ciudad, Jorge Macri.
Luego del paquete de medidas anunciado por el ministro de Economía, Luis Caputo, Macri, mostró su apoyo pero reconoció el efecto “doloroso” que tendrán en la sociedad. “Los anuncios van en línea con lo que el Gobierno planteó, es la situación en la que estamos. (Javier) Milei se está haciendo cargo de una catástrofe que dejó el kirchnerismo, particularmente (Sergio) Massa el último año, y está asumiendo el costo más complejo que es decirle a la gente que estamos muy mal y vamos a tener que hacer cosas dolorosas”, contextualizó. “Argentina, antes de estar mejor, va a estar peor”, remarcó.
“La gente es muy consciente que como íbamos, no íbamos a ningún lado. Más allá de algún momentito de bienestar, esa gente siempre viene perdiendo”, opinó sobre la situación económica y política del país.
En declaraciones a Todo Noticias (TN), el mandatario porteño señaló -apuntando a la gestión de Alberto Fernández- que “Milei está asumiendo riesgos que se tomaron antes”. “Este barco viene llenándose de agua hace tiempo y nos venimos hundiendo lentamente. Podemos hacer como si no nos damos cuenta o asumir el costo de cambiar hábitos”, planteó. “No es fácil enfrentar esta realidad, seguramente será muy doloroso para eslabones muy débiles de la sociedad”, advirtió.
Macri desconoce la tolerancia que tendrá la sociedad al ajuste planteado desde el Gobierno Nacional: “Hay que ver cuanto aguanta la gente, esa es la tensión que tenemos siempre los que gobernamos”. No obstante, considera que “hay un momento en que la gente se enoja pero después las cosas empiezan a funcionar y dicen ‘mirá, valía la pena’”.
Además, “todo esto se va a cruzar con un verano difícil desde lo climático, con cortes de luz”, anticipó. “Vamos a tener que estar cerca, garantizando la asistencia a los electrodependientes, garantizando el agua donde haga falta, para que todo aquel que esté sufriendo sea atendido por el Gobierno de la Ciudad”, continuó. En este marco, informó que ya mantenido reuniones con la iglesia católica, con iglesias evangélicas y con organizaciones sociales, para anticiparse a la profundización de la crisis.
“Estoy convencido que antes que estemos mejor vamos a estar un poco peor. Como gobierno tengo que acompañar la decisión de Milei y tratar de minimizar las consecuencias de las políticas probablemente duras, pero correctas que tiene que tomar”, expresó.