La organización de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 adquirieron para los deportistas olímpicos camas hechas de cartón reciclado, que algunos medios y deportistas ya describieron como “camas antisexo”, ya que se cree que, al ser extremadamente ligeras, solo pueden soportar el peso de una persona.
Sin lugar a dudas es una de las curiosidades esta nueva ediciión de los JJ.OO y algunos se divierten demostrando su solidez en redes sociales. El gimnasta irlandés Rhys McClenaghan hizo viral un video donde insistió en demostrar que la información sobre la supuesta fragilidad de las camas, era inexacta.
«Se supone que las camas son ‘anti-sexo’, si están hechas de cartón, deberían romperse al menor movimiento brutal, dicen. No es cierto, son ‘fake news’», tuiteó el deportista.
“Anti-sex” beds at the Olympics pic.twitter.com/2jnFm6mKcB
— Rhys Mcclenaghan (@McClenaghanRhys) July 18, 2021
Antes de él, el estadounidense Paul Chelimo había bromeado sobre las camas destinadas, según él, “a impedir toda intimidad entre deportistas. Estas camas podrán soportar solamente el peso de una sola persona con el fin de evitar toda situación que no sea deportiva”, escribió el especialista de medio fondo en redes sociales.
Beds to be installed in Tokyo Olympic Village will be made of cardboard, this is aimed at avoiding intimacy among athletes
Beds will be able to withstand the weight of a single person to avoid situations beyond sports.
I see no problem for distance runners,even 4 of us can do😂 pic.twitter.com/J45wlxgtSo
— Paul Chelimo🇺🇸🥈🥉 (@Paulchelimo) July 17, 2021
Incluso la cuenta de Twitter del servicio de prensa del Comité Olímpico Internacional (COI) se involucró en el «asunto de las camas anti-sexo», retuiteando el video de Rhys McClenaghan y explicando que recibían «muchas preguntas sobre estas camas ecológicas de la Villa Olímpica».
La empresa responsable de su fabricación, Airweave, explicó a la revista Dezeen que el concepto era “cumplir con el Plan de Sostenibilidad de los Juegos”. Y es que, además de ser reutilizadas para los Juegos Paralímpicos, las camas serán donadas posteriormente a varias organizaciones japonesas.
Sin embargo, la versión de que las camas fueron diseñadas para desalentar a los atletas de tener relaciones sexuales en la villa olímpica en medio del covid-19 parece tener lógica, porque el pasado febrero los organizadores publicaron un manual de 33 páginas que pide a los atletas minimizar la interacción física.
El documento no menciona directamente las relaciones sexuales, pero subraya que es necesario “mantener al mínimo las interacciones físicas con los demás” y “evitar el contacto físico, incluidos los abrazos y los apretones de manos”.
El manual empezó a circular en el momento en que los organizadores anunciaron, como ya es tradición, la distribución de 160.000 condones gratuitos en la villa olímpica. Sin embargo, a los atletas se les ha recomendado que en lugar de usarlos se los lleven a sus países como recuerdos.
La Villa Olímpica es tradicionalmente un lugar de encuentro. En los últimos Juegos de Invierno de 2018, en Pyeongchang (Corea del Sur), la aplicación de citas de Tinder aumentó su uso en un 350%. En Río, en los Juegos Olímpicos de 2016, los organizadores distribuyeron 450.000 preservativos, es decir, 42 por atleta.