El salón de la planta baja del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad fue este lunes el escenario de la jura de los cuatro nuevos integrantes de la Cámara de Apelaciones. El acto se desarrolló bajo un estricto protocolo de distanciamiento social, mientras que también contó con la participación de jueces y miembros de la justicia porteña de manera virtual.
Asistieron de manera presencial la presidenta, Inés Weinberg, sus vocales, Marcela de Langhe y Santiago Otamendi; y el titular del Consejo de la Magistratura local, Alberto Maques, se realizó la ceremonia. En forma virtual participaron los restantes miembros de nuestro máximo tribunal, como así también los consejeros porteños, quienes siguieron la transmisión en directo a través del Canal de YouTube del Consejo de la Magistratura.
La disposición de la sala ubicó a los cuatro flamantes integrantes a una prudencial distancia de la mesa central redonda que tenía como testigos del acto un ejemplar de la Constitución Nacional y uno de la Carta Magna de la Ciudad de Buenos Aires.
Fue la titular del TSJ porteño, quien tomó el juramento de fórmula delante del estrado. En primera instancia, fue invitado a acercarse Pablo Mántaras, quien se comprometió ante la patria. En segundo término, lo hizo Laura Perugini, quien eligió comprometerse ante el pueblo de la Ciudad de Buenos Aires. Posteriormente, fue el turno de Marcelo López Alfonsín, quien eligió jurar ante el pueblo de la Ciudad. Finalmente, Nieves Macchiavelli también juró ante el pueblo de la Ciudad. Todos ellos muy aplaudidos por el puñado de asistentes, tras sus respectivas juras firmaron el acta correspondiente.
Consultado por iJudicial, Mántaras transmitió su satisfacción por el trascendental paso dado y a la vez señaló que «es la culminación de muchos años de trabajo y sacrificio tanto personal como profesional, de capacitación y de aprendizaje». «Estoy particularmente feliz por ir a la Sala I, porque es en esa misma sala donde comencé a trabajar cuando ingresé al Poder Judicial de la Ciudad. Ese es un aliciente y un incentivo más para este nombramiento», concluyó.
Mientras López Alfonsín indicó que «es el final de un largo proceso de designación que se llevó adelante con todos los pasos constitucionales, aún en medio de las dificultades propias de este año tan especial». Agradeció al Consejo de la Magistratura, la Legislatura, y el Tribunal Superior de Justicia, porque explicó que «se sobrepusieron a las dificultades del aislamiento social, preventivo y obligatorio y pudieron llevar adelante la puesta en marcha de una nueva sala en el fuero». «Será un desafío para nosotros, los jueces que ayer asumimos, implementar de forma rápida y eficaz las mejoras en el servicio de justicia que la sociedad porteña exige y se merece. En especial, con la pronta puesta en marcha de las competencias asignadas en el marco de las relaciones de consumo«, añadió. Al respecto, el flamante camarista puntualizó que «se trata de una materia local que siempre debió ser parte del Poder Judicial porteño en cumplimiento del mandato de autonomía constitucional fijado en el articulo 129 de la Constitución Nacional». «Ojalá muy pronto esa transferencia de competencias se afiance con un nuevo paso en la consolidación de esta autonomia porteña aún incompleta y por la cual juramos conforme el articulo 6 de la Constitución local», completó.
Para Macchiavelli, se trató de un evento institucional muy importante para la ciudadanía, que «puso finalmente y formalmente en funciones a los nuevos magistrados y magistradas». «También un evento de gran significancia desde lo personal, en tanto ha sido un logro profesional muy esperado», concluyó tras un breve diálogo con iJudicial.
Finalmente, Perugini destacó que el Poder Judicial sigue creciendo y señaló que «es un honor, luego de mis 20 años de trabajo ininterrumpidos en el fuero Contencioso Administrativo y Tributario, integrar la Camara de Apelaciones con prestigiosos colegas». «Se suma, esta vez, una nueva temática sobre los derechos de los consumidores, lo cual genera un compromiso con los ciudadanos y una responsabilidad al momento de juzgar», añadió. Agradeció por la organización del acto de jura «en estos tiempos difíciles», a las autoridades del TSJ y el Consejo de la Magistratura, a las que estuvieron en forma presencial y a las que lo hicieron en modo virtual.-
En el caso de Mántaras, se incorporó a la Sala I. Mientras que los restantes camaristas se incorporan a la nueva Sala IV del fuero.
La información fue dada a conocer por iJudicial.