Junto a sus cinco hijos y su esposa, Melania Trump, Donald Trump juró el cargo en el Capitolio como el 45° presidente de los Estados Unidos y pronunció su primer discurso como presidente. Después comienza el desfile presidencial por las calles de Washington desde el Capitolio hasta la Casa Blanca. Un grupo de manifestantes ha anunciado que tratarán de interrumpir el recorrido. Su protesta no está autorizada. También Mike Pence juró como vicepresidente.
Así, se estimó (previo al acto) que los presentes para el acto de asunción superará los 900 mil asistentes. Mientras que los actos oficiales de asunción concluirán el sábado con una misa de oración para el presidente y su vice.
Violencia y detenidos en Washington durante la ceremonia de juramentación de Donald Trump #AFP @Zach_Gibson5 pic.twitter.com/GZDYmnxmiW
— Agence France-Presse (@AFPespanol) January 20, 2017
Mientras tanto, en las calles miles de ciudadanos protestan en contra su asunción y, sumado a su baja imagen positiva, los organizadores del evento decidieron acortar el acto de 120 a 90 minutos el tradicional desfile del presidente y su mujer a lo largo de la avenida Pensilvania. Temen que haya demasiadas cortinas cerradas.
Lo que va creciendo, en cambio, son las convocatorias a marchas de protesta y la cantidad de legisladores demócratas que anunciaron su decisión de no asistir a la ceremonia de jura como mensaje de boicot a un presidente al que consideran “no legítimo”.
Por eso mismo, el mismo Trump auguró que su toma de posesión sería masiva y se refirió al grupo de motociclistas que está viajando a Washington para protegerlo de las protestas, a los que describió como “una seguridad añadida”.
“Montan en esas Harley, generalmente son Harley, hechas aquí en Estados Unidos. Hoy los vimos en unas tomas desde unos helicópteros sobrevolando una carretera en algún lugar del país. Hay miles de estos tipos viniendo a la ciudad. Son grandes personas y creo que logré el 100 por ciento de sus votos”, aseguró.
El Presidente electo hizo una visita fugaz a Washington tras más de un mes de ausencia y a tan solo tres días de su toma de posesión para asistir a una cena con 500 diplomáticos, políticos y empresarios.
En su discurso, Trump sacó a relucir su característico estilo y elogió a su elegido para comandar la diplomacia estadounidense, el petrolero Rex Tillerson, con el que ironizó sobre su nuevo trabajo.
“Me parece que es más duro de lo que él creía. Ha dejado su vida de ensueño. Iba a un país, se llevaba el petróleo, iba a otro país. Es duro tratar con estos políticos, ¿cierto? Él va a ser increíble”, dijo Trump, al declararse “orgulloso” de todo su gabinete.
Mientras tanto, las protestas arden en las calles desde horas anteriores al acto de asunción. La más visible se desarrolló durante el jueves en Nueva York, y contó con la asistencia de figuras de peso como los actores Robert De Niro, Alec Baldwin, Mark Ruffalo y Julianne Moore, el documentalista Michael Moore y el mismo intendente de la ciudad, el demócrata Bill de Blasio.