El pasado martes todo estaba dispuesto para que la Federación Universitaria de Buenos Aires tuviera la elección de sus autoridades, algo que no sucede desde 2013. Pero la política estudiantil sufrió un duro revés.
Es que tanto desde el oficialismo –integrado por una doble conducción de La Mella y el FIT- como de la oposición reformista –integrado por Nuevo Espacio, radicales, socialistas y macristas- se tiran la culpa de lo sucedido.
En lo fáctico, un vallado impedía el ingreso de personas a la sede de la Fuba donde se desarrollaba la elección. Desde el reformismo denuncian que “una vez más la Mella y el PO desconocen el voto de los estudiantes. Usurpan la conducción de la FUBA mostrando que lo único que les importa son los negocios, mientras los estudiantes no tenemos un gremio que defienda nuestros derechos”.
Además, explicaron que a las 18.30 se hicieron presentes los 60 delegados que tenían “pero impidieron con vallas y violencia que participemos de la elección”. “De tal calibre es el escándalo que volvieron a autoproclamarse como conducción, sin ninguna elección que los legitime. Sólo para sostener una Fuba que no presenta balances, que no es transparente y que, con dos presidentes, divide el movimiento estudiantil”, dijeron luego en un comunicado.
Según trascendió, el oficialismo de la izquierda intentó hasta último momento un acuerdo con La Cámpora (que ostenta entre 10 y 12 delegados) para lograr votar y mantenerse en la conducción; pero la agrupación kirchnerista pedía a cambio un lugar en la conducción, pedido que no fue aceptado por la izquierda.
Mientras tanto, las versiones desde el oficialismo plantean otro panorama: dicen que no hubo quórum ya que ninguna lista reunió los 66 delegados necesarios.
Julián Asiner, presidente actual de la Fuba, del PO, declaró: “Derrotamos el pacto que quería tejer el rector Barbieri para desplazar a la actual conducción combativa de la Federación”.
Asiner dijo que “también fue derrotada la política de La Mella-Patria Grande, que pretendió otorgar una presidencia de la Fuba a La Cámpora, integrando al kirchnerismo a la conducción. La UJS rechazó este sometimiento de la izquierda y de la Fuba a una fuerza que gobernó, y aún gobierna Santa Cruz y Tierra del Fuego, al servicio de los grupos capitalistas, ajustando y reprimiendo a los trabajadores”.
“Como nuestras diferencias son radicales, de fondo, propusimos al kirchnerismo un acuerdo de carácter técnico, que consistía en derrotar en común a Nuevo Espacio-Franja Morada, y que luego cada fuerza obtuviera la representación proporcional a la cantidad de delegados que reúne: la izquierda en! la conducción, los K en la oposición. Pero tanto La Mella como La Cámpora rechazaron esta posibilidad porque, antes que la FUBA, defienden la formación de una coalición política común: el Frente Ciudadano que reclamó CFK desde Comodoro Py. Ahora tendrán que dar cuenta de su responsabilidad ante todos los estudiantes”.
Así las cosas, la Fuba estuvo lejos de poder elegir a sus nuevas autoridades y continúa con una conducción que no se somete a renovación desde 2013. El acta firmada sentencia: “Siendo las 21.50 la Junta Representativa de la Federación Universitaria de Buenos Aires constata la ausencia de quórum en el Congreso Ordinario de renovación de autoridades. Queda levantado el Congreso y se prorroga el mandato de las actuales autoridades”.