La investigación por la desaparición de Santiago Maldonado tiene en la mira a la Gendarmería. Todas las demás pistas se cayeron. Por eso, la propia ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, en un intento por cubrirse luego de la defensa que hizo de la fuerza, le envió al juez de la causa el informe sobre la actuación de un grupo de gendarmes.
Funcionarios del Ministerio de Seguridad viajaron a la ciudad de Esquel para entregar al juez federal Guido Otranto “una segunda parte” de documentación, con testimonios de los siete gendarmes “que estuvieron más cerca del río”, en referencia al río Chubut, sobre cuya vera, según la denuncia de sus familiares, fue visto por última vez Santiago Maldonado el 1 de agosto pasado.
Ahora se conoció un nuevo testimonio que complica aún más a los gendarmes. Según señaló el diario La Nación, el gendarme Neri Armando Robledo reconoció que le dio un piedrazo a uno de los “encapuchados” que cruzaron el río Chubut.
Robledo formaba parte del grupo que corrió a los manifestantes de la protesta mapuche el 1º de agosto y él habría herido a un manifestante, quien se habría levantado en la orilla e insultado al gendarme
Su relato fue tomado ayer por la Gendarmería y por la noche el Ministerio de Seguridad, a cargo de Patricia Bullrich, se la entregó al juez federal de Esquel, Guido Otranto.
Así quedaría establecido que no eran siete, sino ocho los gendarmes que estuvieron presentes en ese momento cerca del río.
El gendarme, de 27 años, integrante del Batallón 35 El Bolsón, pidió inmediatamente después del operativo en la ruta 40 licencia por “enfermedad de su padre”. Si bien en el listado que la Gendarmería le pasó al Gobierno se encontraba el nombre de Robledo, llamó la atención la falta de información sobre lo que hizo durante el desalojo.
En la declaración, Robledo contó que “uno de los individuos encapuchados le arrojó una piedra que impactó en su rodilla” y que “en defensa personal” tomó una roca “pequeña” y se la tiró a los manifestantes que estaban nadando para cruzar el río. El impacto fue en la “espalda”, según detalló el gendarme.
“¿Cómo se dio cuenta de que lo impactó?”, le preguntó Luis Lagger, comandante general de la Gendarmería, que actuó como entrevistador. Porque el sargento Pelozo, otro de los gendarmes que estuvieron presentes en ese momento, se lo dijo. “Sí, le pegaste, Robledo”, recordó Neri Armando Robledo.
En el relato, Robledo aseguró que el hombre al que le pegó el piedrazo estaba a unos 30 metros y que cruzó a la otra orilla, desde donde lo insultó. “Era una persona robusta y de casi dos metros de altura”, detalló.
La declaración de Robledo no fue la única del día. Dos nuevos testimonios de gendarmes fueron incorporados de urgencia a la causa que investiga el paradero del joven desaparecido.
Anoche, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, admitió la posibilidad de que “algunos gendarmes” puedan estar implicados en la desaparición de Santiago Maldonado.