La jueza María Eugenia Capuchetti y el fiscal Carlos Rívolo estuvieron este viernes en el departamento de Recoleta de la vicepresidenta Cristina Kirchner y le tomaron declaración testimonial en el marco de la investigación por el atentado del que fue víctima anoche. El expediente está caratulado como “tentativa de homicidio agravado”.
Capuchetti y Rívolo volvieron cerca del mediodía a los tribunales de Comodoro Py, desde donde dirigen la investigación. “La víctima declaró”, fue todo lo que informó la jueza antes de entrar a su despacho, en el tercer piso de los tribunales de Retiro.
En las primeras horas de la mañana, el secretario de Justicia, Juan Martín Mena, y el jefe de la custodia de Cristina Kirchner, el policía federal Diego Carbone, estuvieron en Comodoro Py. Mena, funcionario de extrema confianza de la vicepresidenta, estuvo más de dos horas en los tribunales y habló con Capuchetti sobre la investigación.
La jueza y el fiscal dispusieron sus primeras medidas de prueba durante la madrugada. En lo que va de la jornada, declararon como testigos miembros de la Policía Federal Argentina (PFA), la fuerza que tiene a su cargo la custodia de la vicepresidenta, y ocho civiles, que son militantes que estaban anoche en la esquina de Juncal y Uruguay cuando Fernando Andrés Sabag Montiel le apuntó con un arma a la cabeza a la vicepresidenta. La jueza estuvo a primera hora del día en el lugar y ordenó el allanamiento en la casa del acusado.
El celular que le secuestraron a Sabag es un Samsung modelo A13. Mediante el sistema UFED los funcionarios judiciales extrajeron datos del teléfono que serán analizados. Entre las 3 de la mañana y las 12 del mediodía declararon 30 testigos.
La PFA secuestró en el domicilio de Sabag 100 balas calibre 9 milímetros. Esta viernes, el acusado tuvo una reunión con el defensor público Juan Martín Hermida, que lo representará en esta causa.
Hasta su detención, Sabag, nacido en Brasil, vivía en una habitación que alquilaba en San Martín. Será indagado por la jueza, pero por el momento sigue detenido en la sede policial de Cavia 3350.
A diferencia de los que ocurre habitualmente los viernes, día en el que se suele ver menos movimiento en los tribunales federales de Comodoro Py, esta mañana el tercer piso del edificio, donde se encuentra el juzgado de Capuchetti, estuvo colmado.
El pasillo central de ese piso fue bloqueado por la policía federal que custodia los tribunales y durante la mañana se acumularon allí los testigos a los que se les tomó declaración. Las conversaciones solo giran en torno al atentado contra la vicepresidenta.