Los más fieles representantes del cristinismo en la provincia de Buenos Aires llevan meses de encuentros políticos que, no obstante, tomaron trascendencia recién el martes pasado, cuando la vicepresidenta Cristina Kirchner fue la invitada principal, tras conocerse su sentencia condenatoria por el caso Vialidad y su renuncia a las candidaturas en 2023.
Kicillof fue uno de los comensales del último encuentro de la mesa kirchnerista de la provincia de Buenos Aires, en el que la vicepresidenta, parafraseando a Juan Domingo Perón, les pidió a los presentes tomar “el bastón de mariscal”.
En este último encuentro la convocatoria fue mayor por la presencia de la exmandataria tras el fallo por el caso Vialidad, en el que fue condenada a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.
En el último de ellos, además de Cristina, Kicillof y los referentes de La Cámpora, estuvieron Carlos Castagneto (titular de la AIFP); la directora ejecutiva de Anses, Fernanda Raverta; Cristina Álvarez Rodríguez (ministra de Gobierno bonaerense); los intendentes Jorge Ferraresi (Avellaneda), Mayra Mendoza (Quilmes), Fabián Cagliardi (Berisso), Pablo Zurro (Pehuajó) y Gustavo Barrera (Villa Gesell); sindicalistas como Roberto Baradel (Suteba), Sergio Palazzo (La Bancaria), Abel Furlán (UOM), Mario “Paco” Manrique (Smata) y Omar Plaini (canillitas), y legisladores nacionales y provinciales, como Carlos Heller, Vanesa Siley, Leopoldo Moreau, Teresa García y César Valicenti, además de dirigentes como Martín Sabbatella (Acumar), Florencia Saintout (Instituto Cultural bonaerense) y Diana Conti (comisionada del Comité Nacional de Prevención de la Tortura), entre otros.
El asado es el menú predilecto en estos encuentros, que en numerosas ocasiones se realizaron en Ensenada, distrito que conduce Mario Secco, uno de los intendentes bonaerenses más identificados con el kirchnerismo duro. El Complejo Recreativo Cristina Fernández de Kirchner, en la costa de Punta Lara, donde se hizo la reunión del martes pasado, es el lugar elegido cuando los encuentros son en Ensenada. También hubo reuniones al menos en Avellaneda (bastión del exministro Ferraresi, que volvió a la intendencia) y La Plata (sede del gobierno provincial, pero municipio gobernado por Julio Garro de Juntos por el Cambio).
Las reuniones son al menos una vez por mes y comenzaron en los primeros meses del año. “Es una mesa kirchnerista pura, así como otras vertientes [del Frente de Todos] tienen sus propias reuniones. Se repasan los temas del momento y la situación política de la provincia, no son reuniones con un tema específico”, afirmó uno de los invitados.
“Se habla del armado para 2023, de forzar el diálogo y construir puentes”, indicaron.
El origen del grupo, es una derivación de fotos anteriores que no tuvieron continuidad. Una de ellas es la que se tomaron referentes de los partidos que integran el Frente de Todos bonaerense en la Casa de Gobierno de La Plata, con Kicillof como anfitrión. Esa imagen, que se presentó como el inicio de la “institucionalización” del frente, no se repitieron y se mudaron a Ensenada.