La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró este sábado la emergencia internacional por el actual brote de viruela del mono, después de que se hayan declarado ya unos 17.000 casos -cinco de ellos mortales- en 74 países, muchos de ellos en Europa, donde la enfermedad no era endémica.
La decisión fue anunciada en conferencia de prensa por el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dos días después de que un comité de emergencia con expertos en esta enfermedad se reuniera para analizar la posible declaración, que obligará a las redes sanitarias nacionales a aumentar sus medidas preventivas.
Este comité había optado por no declarar la emergencia en una primera reunión celebrada en junio cuando los casos eran 3.000.
En esta ocasión, según Tedros, tampoco hubo consenso total entre los expertos, pero el director general decidió declarar la emergencia en vista del alto y creciente número de casos en diversas regiones de todo el planeta.
Hasta el momento, Argentina registra 13 infectados, de los cuales 12 presentaron antecedentes de viaje previo al inicio de los síntomas.
Todos los casos corresponden al sexto masculino. La Ciudad de Buenos Aires registra cinco contagios confirmados de viruela símica; la provincia de Buenos Aires, 4; Córdoba, 3; y Mendoza, 1.
Desde principios de mayo, cuando se detectó por primera vez fuera de los países africanos donde es endémica, la enfermedad afectó a más de 16.836 personas en 74 países, según los centros para el control y la prevención de enfermedades de Estados Unidos (CDC) a fecha de 22 de julio.
Declarar una emergencia global significa que el brote de viruela símica es un “evento extraordinario” que podría extenderse a más países y que requiere una respuesta internacional coordinada.
La OMS declaró previamente emergencias por crisis de salud pública como la pandemia de covid-19, el brote de ébola en África occidental de 2014, el zika en América Latina en 2016 y el esfuerzo en curso para erradicar la poliomielitis.
La declaración de emergencia sirve principalmente como un pedido para atraer más recursos globales y atención internacional a un brote. Los anuncios anteriores tuvieron un impacto mixto, dado que la agencia de salud de la ONU es en gran medida impotente para lograr que los países actúen de manera obligatoria.
La semana pasada, la Organización Panamericana de la Salud señaló en una conferencia de prensa que la situación de la viruela símica en la región, si bien es moderada, “es preocupante”. Así lo indicó Carissa Etienne, directora de la OPS.
Atribuyeron el aumento de casos a eventos masivos y señalaron a los “hombres que tienen sexo con otros hombres” como los más susceptibles. La funcionaria recomendó a los países “vacunar a los contactos estrechos de viruela símica”, como una de las medidas para controlar la enfermedad.
Etienne dijo que los países de la región con más casos de viruela del mono eran Estados Unidos, Brasil y Perú. Los contagios en el continente representan el 14 por ciento de los registrados en el mundo.