El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, presentó este miércoles la Alcaidía de la Comisaría Nº 15, ubicada en Retiro, en el marco del traspaso progresivo de las facultades y funciones de seguridad que estaban a cargo de la Policía Federal que actuaba en la Ciudad.
Larreta aseguró que “con esto mejoramos el ambiente de trabajo de los policías” y destacó que el Gobierno está “arreglando prácticamente todas las comisarías de la Ciudad”, ya que “había algunas que se caían a pedazos y no podíamos pretender que la gente trabajara bien”.
El Gobierno de la Ciudad está inaugurando alcaidías en algunas de las comisarías para que los detenidos estén resguardados en las condiciones adecuadas y los policías puedan desligarse del monitoreo de las celdas para desempeñar sus funciones en la calle.
“El programa de las alcaidías nos libera más o menos 300 efectivos más para la calle”, destacó el Jefe de Gobierno, quien estuvo acompañado por el vicejefe de Gobierno, Diego Santilli; el ministro de Justicia y Seguridad, Martín Ocampo, y el secretario de Seguridad, Marcelo D´Alessandro.
A su vez, contó que en “prácticamente todos los barrios de la Ciudad, cuando voy a reuniones con los vecinos, la gente dice que empieza a ver más policías en la calle”.
“Eso es por todo el programa que tenemos de ir reemplazando tareas dentro de la comisaría para sacarlos a la calle. Todo esto es en el marco de nuestro plan integral de seguridad, en el que estamos trabajando desde el 1 de enero, que se creó la Policía de la Ciudad”, agregó.
Esta medida surgió a partir de un relevamiento integral para conocer el estado de las 54 comisarías de la Policía de la Ciudad: 49 de ellas (91%) tenían calabozos, y las que no, derivaban a los detenidos a comisarías cercanas.
Sin embargo, sólo el 14% de esas 49 comisarías que sí tenían celdas cumplían con los requerimientos estipulados en la Orden del Día Interna Nº 58 (29/3/2006). La mayoría tenía deficiencias importantes; no contaban con sectores independientes para los procesos de detención; no tenían sistemas de calefacción, refrigeración o vigilancia; había problemas graves de filtraciones, y muchas ni siquiera tenían baños.
En este caso, entre los trabajos que se realizaron, se volvió a poner en funcionamiento el sector de celdas; se hicieron instalaciones antivandálicas en el sector de seguridad; se intervinieron las instalaciones sanitarias y eléctricas; se colocaron equipos de ventilación y se realizaron trabajos de pintura.
Por su parte, Ocampo precisó que esta alcaidía “va a atender a 8 comisarías de la zona, con lo cual vamos a mejorar tanto los desplazamientos de los detenidos como las condiciones de los detenidos”.
El ministro también destacó que las instalaciones están hechas con “los mejores estándares internacionales, cumpliendo con toda la normativa que protege y defiende los derechos humanos de los detenidos”.