Luego de la denuncia del periodista Jorge Lanata en su programa de televisión, en la que señalaba que socios del matrimonio Kirchner lavaron millones de euros en bancos uruguayos, el Gobierno del país vecino salió al cruce y consideró “poco creíbles” las acusaciones.
“Eso es una cosa que dice Lanata. Parece que tiene mucha experiencia en venir a los bancos uruguayos y depositar y tomar un café e irse olímpico. Pero como existe la garantía a la libertad de prensa y la libre información, quienes la manejan se permiten cierta licencia poética”, expresó José “Pepe” Mujica.
En declaraciones recogidas por la televisión, el mandatario insistió en que “no es cierto” que se pueda lavar dinero fácilmente en Uruguay, si bien reconoció que, al igual que ocurre con el negocio de la droga, “siempre puede haber un tráfico clandestino que da para cualquier cosa”.
Mujica atribuyó las acusaciones a la “interna política” de Argentina, donde “se tiran con todo” y en donde es fácil “tirar para el costado”.
En tanto, Lanata respondió a las palabras de Mujica, a quien le sugirió “que se informe de lo que está diciendo antes de hablar porque creo que está mal asesorado”.
“Nadie que se pare diez minutos en una esquina de Punta del Este puede decir que en ese país no hay lavado de dinero”, afirmó el periodista en declaraciones al diario Clarín. “Mujica dice que yo debo saber cómo se deposita plata en Uruguay. Yo trabajé en Uruguay, en dos oportunidades. Yo pagaba impuestos”, agregó.
Por su parte, el vicepresidente uruguayo, Danilo Astori, responsable del área económica del Gobierno indicó que “Uruguay no es un paraíso fiscal” y cuenta con una “rigurosa normativa en materia financiera”.
Astori apuntó, sin embargo, que en caso de existir “un planteo sólido y fundado sobre posibles desvíos de la normativa”, se investigará el asunto.
Precisamente, dos diputados argentinos solicitarán a la Justicia uruguaya que investigue esta supuesta trama de lavado de dinero que denunció Lanata y que incluía a numerosas empresas afincadas en el país.
