Este miércoles no fue un día más. La declaración de Cristina Fernández de Kirchner ante el juez federal Claudio Bonadío por la causa del dólar futuro tuvo repercusiones previas y posteriores a su presentación en los tribunales federarales de Comodorop Py.
La política porteña también fue sacudida por el efecto Cristina. En la Legislatura no se vivió una jornada normal. Los despachos de los legisladores del Frente para la Victoria (FpV) amanecieron cerrados y con un cartel pegado en sus puertas, que no necesitaba de segundas lecturas.
El texto era el siguiente: #13A Este despacho permanece cerrado, se fue junto al pueblo a defender a Cristina”. Debajo del estaba escrito el número de despacho correspondiente.