La jueza porteña Elena Liberatori, de feria en estos días en el Fuero Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad, se convirtió en una piedra en el zapato de Mauricio Macri al resolver en pocas horas, dos planteos realizados contra medidas dispuestas por el Gobierno de la Ciudad. Tras la orden de preservación de los coches de madera retirados días atrás de circulación de la Línea A de subterráneos tras recorrer sus vías durante un siglo, la titular del juzgado N°4, ordenó al Gobierno porteño que “en forma urgente proceda a la reapertura del Taller Protegido Nº 19″ del hospital Borda, cerrado por decisión de la administración porteña en el marco del proyecto de construcción del Centro Cívico.
La resolución de la magistrada concede un planteo realizado por la Defensoría General porteña que, representando a los trabajadores de los talleres, reclamaba la reapertura del servicio intrahospitalario de laborterapia.
“El trabajo es fundamental en la recuperación de quienes viven en el Borda y en el proceso de resocialización que ellos realizan. Según una carta firmada por más de 20 profesionales de la salud, el cierre de estos talleres representa un daño gravísimo para los pacientes del hospital que participan en ellos”, remarcó ante la agencia Télam el Defensor General Adjunto en lo PCyF, Roberto Andrés Gallardo.
La medida cautelar dictada por Liberatori se apoya, entre otros fundamentos, en el fallo de la Cámara CAyT que el pasado 28 de diciembre ordenó que se desestime el proyecto para construir un nuevo Centro Cívico en terrenos pertenecientes al hospital neuropsiquiátrico.
“Lo que queremos, en definitiva, es que a la hora de decidir qué hacer en ese predio se privilegie la vida y la salud de las personas que viven en el Borda sobre los negocios inmobiliarios que se proponen realizar desde el Gobierno porteño”, subrayó Gallardo.
UNA FERIA AGITADA
Molestia. Con esta palabra se describe el clima que en la mesa jurídica del PRO transita la primera mitad de la feria. Tras la satisfacción generada por el pedido de dictado de una medida cautelar rechazada por la jueza Lidia Lago ante el planteo realizado por la legisladora María José Lubertino reclamando que no se suspenda el servicio de la Línea A de subtes, la jueza Liberatori enturbió los ánimos macristas con la protección de los vagones centenarios y la orden de reapertura del taller del Borda.
“Se van a apelar estos fallos”, confirmó a NU una fuente judicial del PRO que no dudó en ver en las resoluciones de la jueza porteña “una reacción que busca golpear al Gobierno de la Ciudad por la decisión de Mauricio (Macri) para que se modifique el funcionamiento de la secretaría villera que, primero con Gallardo y ahora con Liberatori, no hace más que concentrar todos los amparos por temas vinculados con las villas”.
Días atrás, Noticias Urbanas adelantó el proyecto del macrismo para reestructurar la denominada secretaría villera. La iniciativa, si bien tiene tres variantes, quitaría de las manos de un único juez (Liberatori en este caso) la totalidad de las causas “villeras”.
