El accidente por el que un vagón de una formación de la Línea C se descalzó el viernes último dejó secuelas que culminaron con un paro de los trabajadores, que temen que se produzca un derrumbe.
Este lunes a las 10:52 comenzó la medida de fuerza, mientras los metrodelegados denunciaban la existencia de “falta de seguridad operativa”.
“Las obras en la estación Constitución, donde hubo un accidente el viernes, no están concluidas. Esa parte de la estación se encuentra bajo peligro de derrumbe y debido a eso no puede estar operativa hasta que finalicen las reparaciones”, sostuvieron los trabajadores.
Cabe recordar que el viernes a las 10:25, cuando se produjo el descarrilamiento, se realizó un diagrama de emergencia entre las estaciones de Retiro y San Juan. Este servicio se extendió hasta la madrugada, mientras los equipos técnicos apuntalaban el desprendimiento de mampostería y de un sector del techo que resultaron afectados el viernes.
Los delegados aseguran que los trabajos no están concluidos y que por eso no prestarán servicios hasta Constitución hasta tanto no estén terminados y la zona sea segura.
Por su parte, la empresa Metrovías desmintió, por medio de un comunicado enviado a los medios que “se haya producido un derrumbe o que exista peligro de que esto ocurra en la Línea C, a raíz del incidente ocurrido el día viernes, en el que por un error humano la formación se descalzó de las vías e impactó en la infraestructura. Durante el sábado y domingo, un equipo técnico y especialistas de Metrovías realizó todas las tareas necesarias para restituirla a su condición original. Producto de esto hoy la línea comenzó operando en toda su extensión sin riesgo alguno para los usuarios y sus empleados”.
Finalmente, la empresa que opera el servicio de subterráneos expresó que “lamenta las molestias ocasionadas por una medida gremial de estas características, que dejan a miles de usuarios sin poder utilizar el Subte para trasladarse por la Ciudad”.