“Hasta la ampliación anunciada hoy, los BRICS representaban casi un tercio de la economía mundial, casi la mitad de la población mundial, el 30% del territorio global y, en los últimos años, contribuyeron a más del 50% de crecimiento del producto bruto del mundo. Si uno ve los países que se están sumando, como Argentina, y los más de 40 que quieren hacerlo, este grupo ampliado se va a constituir en uno de los espacios más importantes a nivel mundial. Juntos vamos a representar la voz de los países emergentes, que históricamente hemos sido postergados en los organismos internacionales”, dijo.
Y agregó: “El nuevo Banco de Desarrollo de los BRICS ampliados se va a transformar en el instrumento más relevante para cambiar la arquitectura financiera mundial, para que se oriente al sistema productivo, y no al sistema de especulación financiera, y que sea asi el mejor camino para generar bienestar y prosperidad en nuestros pueblos. La propuesta de uso de monedas propias para las inversiones y el comercio entre sus socios cumplirá un rol determinante en la economía mundial”.
Además, señaló: “Tenemos una gran potencialidad porque contamos con reservas de minerales estratégicos y de energías, somos grandes productores de alimentos, incrementamos enormemente nuestras capacidades tecnológicas y contamos con la mayor parte de la población mundial”.
Vaca Narvaja manifestó también:“El fortalecimiento de los BRICS resulta central para el desarrollo de los países del sur global. Creo que este espacio representa a países que tenemos los mismos problemas y las mismas necesidades, por eso va a ser más fácil trabajar de forma conjunta para fortalecer nuestro desarrollo. Realmente estamos muy contentos de que este proceso se esté acelerando, del apoyo de China y de todos los países de los BRICS”.
Para concluir, señaló: “Ampliar este ámbito es clave para construir un orden global más armónico donde la cooperación reemplace a la confrontación; el desarrollo productivo, a la especulación financiera; el principio de respeto mutuo, al intervencionismo unilateral; la integración económica, en lugar de las sanciones anacrónicas; y la transferencia de tecnología, en reemplazo de los bloqueos tecnológicos”.