Intendentes y exintendentes de la Segunda Sección Electoral se reunieron en Arrecifes con dos de sus colegas alineados con el Grupo Esmeralda, Gabriel Katopodis y Juan Zabaleta.
El objetivo de la reunión fue el de anudar vínculos para enfrentar la inevitable interna que se producirá el año próximo para elegir a los candidatos que van a enfrentar las elecciones legislativas.
El anfitrión fue el exintendente local, Daniel Bolinaga, que invitó al jefe comunal de Salto, Ricardo Alessandro; al de Ramallo, Mauro Poletti y al alcalde de Colón, Ricardo Casi. También fueron de la partida el legislador provincial Andrés Quiteros y el exintendente de Baradero, Aldo Carossi.
Según los asistentes, se efectuó un análisis de la situación económica, social y productiva, pero los puntos a discutir mutaron rápidamente hacia la rosca política y terminaron poniendo sobre el tapete la reorganización del PJ bonaerense. Todos coincidieron en un punto crucial: los intendentes deben retener el protagonismo que ejercen hoy en el proceso político que culminará con la normalización institucional del partido.
También coincidieron los intendentes en que la falta de liderazgo partidario culminó con la dispersión existente por estos días, en que los jefes comunales están organizados en al menos cuatro grupos, entre los cuales se encuentran los “esmeraldos”.
Finalmente, el anfitrión, Daniel Bolinaga, explicó las razones y las conclusiones del encuentro. “Fue un encuentro de dirigentes del peronismo, en el que, entre otras cuestiones, hablamos de cómo nos estamos reordenando y reorganizando dentro del partido y cuál es la participación de los intendentes, que somos quienes creemos que en la provincia de Buenos Aires tenemos que conducir este proceso”, señaló.
El exalcalde, en declaraciones a una agencia, negó que se haya tratado el tema de las candidaturas, aunque volvió a destacar que “los compañeros intendentes son quienes deben conducir este proceso de reorganización del partido, después de la derrota electoral del año pasado”.
Para explicar este último punto, el arrecifense alegó que los intendentes son los que “tienen la legitimidad necesaria, otorgada por la gente a través de los votos”, aunque se vio obligado a adelantar que “la intención no es excluir a nadie”, por si acaso.
