Los intendentes del Frente de Todos del conurbano transitan los últimos días de la campaña de cara al 14 de noviembre, sacando cuentas sobre qué puede llegar a sucedar y, en base a eso, cómo seguirán, los próximos dos años hacia la elección 2023.
A diferencia de las PASO, en esta previa electoral el triunfalismo no abunda, salvo en algunos que municipios considerados asegurados. Por el contrario, en la Primera sección electoral hablan de “acortar distancia” antes de “dar vuelta la elección”. En la Tercera sección hay un poco más de expectativa y para eso en el peronismo toman algunos ejemplos de remontadas electorales que hubo, por ejemplo, en Juntos por el Cambio durante la elección 2019.
En la Primera sección electoral hay un municipio que se lleva la atención producto del resultado de las Primarias: San Martín. El municipio que hasta diciembre del 2019 estuvo gobernado por el actual ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, actualmente es conducido interinamente por Fernando Moreira y la primera candidata a concejal para estas elecciones Nancy Cappelloni, secretaria para la Integración Educativa, Cultural y Deportiva del municipio y esposa del ministro.
Sucedió que en las Primarias, Juntos se impuso ante el Frente de Todos. La oposición se alzó con el 37,43% de los votos, mientras que el FdT se quedó con 33,13%. San Martín es uno de los distritos de mayor peso electoral de la Primera sección electoral y cuenta con 337.218 electores. Tan importante, que el lunes, en el marco de las campaña de cercanía que viene llevando adelante el gobierno, fue hasta el distrito el presidente Alberto Fernández.
Hay varios factores que intervienen en la elección legislativa. La característica de “voto castigo” que pareció imperar en las PASO es uno. Además, el distrito es vecino a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y a municipios que gobierna la oposición Tres de Febrero (Diego Valenzuela), Vicente López (Jorge Macri), San Isidro (Gustavo Posse) y San Miguel (Jaime Méndez).
Ituzaingó es otro municipio que funciona como caso testigo. Allí Juntos ganó en las tres categorías y Gastón Castelnuovo fue el vencedor de esa interna. Desde el día después el intendente de Ituzaingó, Alberto Descalzo, se puso la campaña al hombro en este segundo tramo, reconocen en el oficialismo, pero sobre todo en la oposición. Según Infobae, cerca del postulante opositor esperan poder sostener los cuatro puntos de diferencia.
Con @alferdez, @fmoreiraok y @nancycappelloni visitamos Tocki, una textil de #SanMartín que duplicó sus empleados y sigue invirtiendo en maquinaria. No dejaremos de acompañar a quienes producen y crean laburo.
La recuperación de la Argentina va llegando al día a día de la gente. pic.twitter.com/8XA1a0NrQE
— Gabriel Katopodis (@gkatopodis) November 8, 2021
Otro distrito donde no abunda el triunfalismo es en Tigre. El intendente, Julio Zamora, espera dar vuelta la elección que en las PASO lo dejó entre 5 y 6 puntos abajo de Juntos. En el peronismo recuerdan algunas elecciones locales donde Juntos por el Cambio logró torcer el rumbo de de lo que había pasado en las PASO. En Lanús, el intendente Néstor Grindetti y en La Plata -Julio Garro- habían quedado atrás por un promedio del 10%. Sin embargo en las generales lograron dar vuelta la elección.
Uno de los municipios bonaerenses del conurbano donde asoma un halo de expectativa es en Lomas de Zamora. En el distrito que hasta hace poco gobernaba el actual Jefe de Gabinete bonaerense, Martín Insaurralde, el FdT descuenta una victoria.
Hasta hace algunos días, la expectativa en Lomas y en buena parte de la Tercera sección electoral era ampliar la ventaja ante Juntos, entendiendo que el conurbano sur fue el único circuito electoral donde el peronismo logró ganar en la provincia de Buenos Aires.
Sin embargo, el clima es más bien diferente a los días previos a las PASO. De acuerdo a los datos que pudo recabar Infobae, desde hace un tiempo, distintos dirigentes del Frente de Todos vienen declarando que existe la posibilidad de una derrota electoral y esbozan el término de “perder ganando”; es decir quedar detrás de Juntos pero que en la composición final implica sostener una leve ventaja o una situación de paridad con la oposición tanto en la Legislatura bonaerense, como en los concejos deliberantes.