Intendentes de distintas provincias del país se reunieron este martes para realizar una autocrítica tras las derrota electoral y analaizar la etapa de renovación en el PJ. En ese contexto, se propuso que el justicialismo realice treinta reuniones a lo largo y ancho del país, para continuar con el análisis sobre el futuro del partido y quién será su conductor.
Durante el cónclave, los jefes comunales coincidieron en que el PJ debe definir su liderazgo en elecciones a partir de mayo de 2016. “Tiene que haber una elección interna, siempre ha sido así”, planteó el intendente de Ituzaingó, Alberto Descalzo, quien aclaró: “Como siempre en el peronismo, se acompañará al que gane”.
Estas definiciones se contraponen con lo expuesto por el diputado Máximo Kirchner, quien había asegurado que su madre, la ex presidenta Cristina Kirchner, es quien “conduce” al peronismo.
Entre los presentes, estuvo Julio De Vido. El ex ministro de Planificación Federal y actual diputado nacional fue el defensor de la línea bajada por Máximo. “Estamos bajo la conducción de una persona que juntó 500 mil manifestantes en apoyo el 9 de diciembre”, recordó. Y consideró que el justicialismo tiene “un futuro muy importante, primero como oposición y con un rol protagónico en el 2017”.
Por otra parte, el intendente de Cañuelas, Gustavo Arrieta, anticipó que el PJ tendrá “la mejor predisposición de convivencia democrática” con la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal.